CAPÍTULO 1(PARTE I)

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El caballero que aspire a
obtener mi mano,
deberá conocer el misterioso
arte del flirteo,
y saber sortear con éxito
las ineludibles trampas del destino.

Del diario de la señorita M.G

Si había algo que le provocaba agobio y ansiedad a Richard Colleman eran las veladas privadas, el tipo de acontecimiento en donde se reservaba la admisión para un número selecto de invitados; ya que a diferencia de lo bailes multitudinarios donde camuflarse entre la muchedumbre era sencillo, en una fiesta de máximo cien almas no tenía oportunidad de pasar desapercibido y así evitar la cháchara social y el bochorno que para su condición que ésta implicaba.

Desafortunadamente esa noche le tocaría presentarse en la velada de la condesa de Harrison, una anfitriona más que destacada de la sociedad, la cual organizaba una vez al año una de los eventos más esperados de la temporada.
La lista de invitados era confeccionada con un desconocido criterio, y solo se seleccionaba a los miembros más importantes de la aristocracia. Aunque todos deseaban recibir una invitación, ya que el evento era la personificación de la opulencia y la elegancia.

Aquel año, y debido a un extraño milagro, Richard había sido invitado, y su madre se había puesto tan feliz y orgullosa al recibir la carta lacrada, que él no atinó a intentar encontrar una excusa para rechazar la invitación. Hacerlo hubiera sido equivalente a cavar su propia tumba.
Marion era una madre dedicada y afectuosa, pero en lo que al futuro y la solteria de sus hijos se trataba, era un dragón implacable.

A la hora indicada Richard hizo acto de presencia en la fastuosa mansión de los Harrinson, y tras saludar a la mujer regordeta y a su enclenque marido quienes estaban apostados a la entrada, se internó en la casa siguiendo el derrotero de personas que hacían lo propio.

A pesar de su inexistente buen humor, y de que estaría solo porque Sir Chester no había sido convidado, ni tampoco su hermana que se había quedado desconsolada al ser rechazada para tambien decepción de su madre; no todo eran malas perspectivas, ya que además de ser una noche de primavera preciosa, las veladas de lady Harrinson solían destacar por ser diferentes y obsequiar a sus invitados con diversos entretenimientos.

En esa oportunidad la anfitriona había organizado una búsqueda del tesoro, para la cual se había colocado al ingresar a cada caballero un grabado en la muñeca, el cual coincidía con el sello estampado en el carnet de baile de alguna de las damas solteras presentes.

Cuando el anuncio fue hecho, Richard de inmediato se puso nervioso, debía buscar entre las mujeres a su compañera e iniciar la búsqueda del objeto escondido. Esperaba que no le hubiese tocado alguna dama déspota o cruel que se negara a tenerlo de compañero, no sería la primera vez que sufriera tal humillación.

En su brazo se hallaba dibujado un pequeño roedor color blanco, y amén del afamado humor retorcido de Lady Harrison, Richard supo quién era la dama elegida, y respiró aliviado al verla en un rincón cercano a la pista.

Le tomó unos minutos dar con la joven en cuestión, y le agradó confirmar que su teoria era acertada.
Le habían asignado a la dulce lady Clara Thompson, una querida amiga de su hermana, a quien ya había tratado en otras oportunidades.
Lo que no le gustó demasiado fue ver la expresion decaída de la dama, quien presumiblemente debía de sentirse mal por el hecho de que nadie olvidara el cruel apodo que le habían puesto, y por eso el grabado hacía referencia al animal con la que la comparaban: un ratón.
Todavía no comprendía cómo su amigo Henry, quien además de ser primo de la joven y además apreciarla, había hecho hace unos años aquel desafortunado comentario sobre ella y del que había salido luego aquel feo apodo. Sabia que Henry se había arrepentido aunque no hubiese sido el quien la apodara, pero al haberla comparado con un ratón asustadizo había generado que se propagara ese despectivo apodo, y solo por eso Henry se avergonzaba de sí mismo cada vez que oía a alguien llamar a su prima así.

LA PERDICIÓN DEL CABALLERO*EL CLUB DE LOS MALOS PARTIDOS*RETIRADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora