𝑎́𝑔𝑎𝑝𝑒.

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Yoongi.

—Parece que tendré que volver con mis padres. —Seokjin me dijo, cuando terminaba de abotonarse la camisa.

¿Y cuándo dejaba de irse tan rápido? Tan pronto como terminamos, él corre con la cabeza gacha.

"Ese cabrón ha estado en el club desde el mediodía, que molesto." leí mis mensajes, sin pensar en irritarme con él.

—Si, también tendré que ir al ejército. —Seokjin seguía balbuceando, y yo realmente no tenía ganas de prestarle atención. —Ah y mi padre tiene problemas de salud. Pero al menos volveré a casa y viviré allí antes de ingresar al servicio.

¿Qué?

—¿Qué? —después de eso reaccioné. —¿Tú desde el inicio querías irte?

—Mi mamá es la única que trabajaba y pues ella necesita ayuda. —Seokjin se levantó dándome una buena vista de su increíble culo. —Hay mucho que hacer.

Dios mio, ese culo puede que, ¿tengamos otra ronda?

Entonces, ¿qué fue lo que él dijo ahora?

—¿Por qué me dices sobre eso recién ahora? —pregunté levantándome.

—A-ah.. cierto. —su cara decayó. —Tienes razón, no era necesario contarte todo eso. No tenemos ese tipo de relación.

—¿Ah? No, no es... —me sentí como un estúpido. —¡No-no! ¡No es eso! —lleve una mano a mi nuca, preocupado por cagarla. —Tú no me habías contado nada así.

—Está bien. Tú y yo no tenemos ese tipo de confianza. —Seokjin se mantuvo serio, mientras se ponía sus pantalones. —En esta semana tengo que recoger mis cosas e irme del apartamento, tomar un descanso académico, así que estaré ocupado.

Seokjin se puso sus zapatos, ignorando lo que pudiera decirle. —Y ya que nos hemos visto todo este tiempo pensé que debería de despedirme. —Seokjin salió, sin darme tiempo a nada.

[Al otro lado, Seokjin se recargó en la puerta.

—Fue más fácil, de lo que pensé... —sin poder evitarlo, comenzó a sollozar.

¿Qué estaba esperando?]

—Así que, Yoongi, como te decía. Puedes participar en la apertura, ¿Sí? —la chica frente mío estaba hablando, pero yo no le prestaba atención. —Chicos lindo serán más que suficientes. ¡No! ¡Incluso los hermosos!

—A-ah...

Pasó una semana...

"Fue divertido... Cuídate."

Maldito mentiroso y por qué engañarme así.

—También trae a tus amigos, cuando terminemos iremos a la ciudad. ¿Sí? ¿Está bien?

—¿Quién es el siguiente?

—¡Yo! ¡Yo!

—Bien Kim Seokjin, pasa. —lo observaba cuando era mi turno de descansar.

Parecía muy decente y pequeño. Descuidado y silencioso. No nos cruzábamos tanto, a pesar de que compartimos tronco común en nuestras carreras.

Él era sólo un empleo de un estudiante ejemplar y tranquilo. Aparte de su bello rostro, no había nada que mirar.

Cuando él tocó el dorso de mi mano, me di cuenta de que me era Seokjin, el niño lindo de mi facultad. Y me di cuenta de que tenía una sonrisa seductora, no lo pensé más.

𝒆𝒓𝒐𝒔 ; 𝑦𝑜𝑜𝑛𝑗𝑖𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora