RENT A BOYFRIEND ❚ yutae

20 | drift

⠀⠀Ser jodidamemte cerrado emocionalmente, era una característica de Yuta que siempre había estado fuertemente arraigada a él. No era la clase de persona que decía lo que pensaba ni como se sentía. Le costaba admitir lo que tan en el fondo de su mente ocultaba y que procuraba no demostrar.

⠀⠀Doyoung no había sido la excepción. Tampoco lo había sido Yoonoh. Aunque les conocía de toda la vida y sabía que no iban a juzgarlo, fue incapaz de expresarles sus temores, su historia, el miedo que sentía por albergar sentimientos incorrectos.

⠀⠀Taeyong era… una cosa rara y diferente, que se le metía bajo la piel y que le impulsaba a actuar sin pensar. Cuando abrió la boca para dar inicio a su relato, se dio cuenta de que las palabras brotaban con una facilidad aterradora y que no había planeado.

⠀⠀La historia empezaba de una manera no muy agradable, y que como cualquier evento desafortunado, acabó en tragedia. Si hubiera tenido la oportunidad de cambiar algo, probablemente hubiera sido aquella noticia.

⠀⠀─ Los doctores han diagnosticado a tu hermana ─ dijo su madre ─. Está enferma, y no tiene cura.

⠀⠀Recordaba la voz quebrada, los ojos cristalizados, y los labios temblorosos. Recordaba no haber podido procesar sus palabras, cada una desvaneciéndose y haciéndose tan poco creíbles, que Yuta llegó a considerar que había sido un simple sueño. No fue hasta que piso la clínica, que su cerebro hizo click, y se derrumbó en lágrimas al ver a su hermana en una cama blanca y pulcra, por la que habían pasado cientos de pacientes cuyos destinos habían pendido de un hilo, como lo hacía ahora el destino de ella.

⠀⠀Los primeros meses fueron soportables. En su rostro y en su cuerpo apenas había rastro de su enfermedad. Momoka se fue de la clínica y continuó sus clases, continuó con sus actividades usuales, como caminar por el parque o jugar fútbol con Yuta en el patio trasero. Casi podía sentir a su hermana regresando, podía sentir que mejoraba, que nunca había estado enferma.

⠀⠀Pero lo estaba, y cuando al siguiente año volvió a recaer, en el corazón de Yuta apareció una grieta inamovible que empezaba a propagarse.

⠀⠀─ ¿Puedo verla? ─ preguntó Yuta llegando a la clínica. Su madre levantó la mirada, sentada en la sala de espera, y cruzada de brazos negó.

⠀⠀─ Tendrás que esperar. Sachi esta con ella.

⠀⠀─ ¿Sachi?

⠀⠀─ Su supuesta mejor amiga ─ suspiró ─. Ven acá, hijo, siéntate.

⠀⠀Tomó lugar en la silla de al lado, sintiéndose confundido cuando las manos de su madre envolvieron las suyas y apretaron de manera fraternal que no era usual viniendo de ella. Los ojos vacíos y oscuros se fijaron en los suyos.

⠀⠀─ ¿Sabes lo que significa ser homosexual?

⠀⠀Frunció el ceño, sin saber a qué se debía aquella pregunta ─ Si, lo sé, es gustar de alguien de tu mismo sexo.

⠀⠀─ Exacto, mi niño ─ le dedicó una sonrisa, en la que Yuta halló amor, más no sabía la crueldad que se ocultaba tras esta ─. Y sabes que eso es incorrecto, ¿verdad?

⠀⠀La ignorancia de la juventud. El creer que su madre era la persona en la que podía confiar. La mujer que conocía el mundo y lo veía de una manera absoluta. La que sabía todo.

⠀⠀─ ¿Por qué es incorrecto?

⠀⠀─ Es antinatural, cariño. Dios creó perfección, hombre y mujer. La homosexualidad es ir en contra de la palabra de nuestro Señor. Es pecado, y el pecado te llevará al infierno. Es por eso que no debes caer en la tentación de Lucifer ─ le dijo acariciando sus nudillos con suavidad ─. Tu hermana lo hizo. Tu hermana se hira al infierno por su pecado. No quiero que te pase lo mismo.