Capitulo 15: Amanecer

25 6 2
                                    

Desperté en el sofá de mi casa, me esforzaba para sentarme ya que mi cuerpo estaba excesivamente pesado, no recordaba muy bien lo que me había sucedido y la mandíbula me dolía un poco, no comprendía porque mi cuerpo estaba tan deteriorado.

Tampoco podía hacer muchos movimientos ya que el dolor inundaba cada musculo en mí, era como si hubiese recibido una gran golpiza -Santo Dios, ¿Qué ocurrió? – Mis dudas era tantas como las estrellas de un cielo nocturno -El Ritual... Los espejos ¿Pero, luego que?

-Will, cálmate no me hagas daño- Expresó una voz cerca de mí, gire mi cuello buscando la fuente del sonido, me dolió mucho, con dificultad enfoque mi vista hasta poder notar a Jeremy sujetando un cuchillo.

No entendía por qué me observaba con tanto pánico - ¿Cómo que te hare daño? Tú eres el que tiene un cuchillo entre manos- La expresión de mi rostro hacía notar mi confusión.

Jeremy suspiró y bajo la guardia soltando el puñal que sostenía, se acercó a mi abrazándome con fuerza – Eres tú amigo, finalmente eres tú.

-Joder, Jeremy me duele el cuerpo no me abraces tan fuerte, oye ¿qué sucedió luego del Ritual? – Intente recordar y fue allí cuando un dolor espeluznante me abrumó toda la cabeza, especialmente mi frente la cual se sentía muy malherida.

-Es mi culpa, te golpeé la frente con una tabla, lo lamento- Justificó con algo de pena la cual se hizo notar en su timbre de voz.

Le mire asombrado - ¿¡Estas loco!? – Intente lanzarle una bofetada, pero mi cuerpo estaba tan mal que solo mis músculos se retorcieron ante el movimiento - ¡Ay! Joder, joder maldición me duele mucho – Cerré los ojos tratando de calmar un poco la sensación.

-Cálmate Will, hice eso para salvarme estabas poseído y querías matarme – A decir verdad, el rostro de Jeremy me daba miedo, su preocupación era muy notoria.

Sentí un agujero en el pecho y la respiración se me hacía cada vez más complicada, miré mis manos las cuales estaban rasguñadas y llenas de moretones, la vista se me borraba momentáneamente y la voz de Jeremy era muy lejana.

-Te lo dijimos pequeñín, eras y serás nuestro- Risas y risas se podían oír a mi alrededor -Ha pasado mucho tiempo, pero finalmente ha sido completado- Pude reconocerlo, era el bufón quien me hablaba y como siempre disfrutaba de mi sufrimiento.

-Maldito seas Bufón, ya me tienes ahora ¿Qué harás? – Mi odio hacia ese espectro era inmenso, siempre estaba mofándose de mi sufrimiento.

-Eso es, ¡ESO ES! Ódiame, con todo tu ser ¡ODIAME! – Sus gritos venían de todas partes, me desesperé por no saber de dónde me sentía sofocado.

- Te matare, no sé cómo, pero te matare- Empuñe mis manos y pude sentir algo agrio en mi pecho tratando de salir.

- ¿Lo vez enano? El odio que me consumió a mí, vive en ti también miserable pedazo de carne- Y de nuevo se reía, odiaba el no poder hacer algo para defenderme.

La impotencia mezclada con las ganas de hacer algo desesperadamente me comían el interior -Dame tu cuerpo, solo pido eso majestad ¡TU CUERPO! Serás libre después de eso confía y verás que mis palabras son ciertas- A decir verdad, me sentí tentado a su propuesta... Pero ¿Qué pasaría si le cedo mi cuerpo? -Ella y yo no podemos habitarte al mismo tiempo ¿Aceptas? – De pronto mi alrededor se convirtió en oscuridad y lo único que podía ver era aquella sonrisa larga acompañada de esas cuencas donde deberían ir los ojos y en lugar de eso solo se apreciaba un punto rojo muy distante.

El Ritual De Los 3 Reyes #PGP2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora