- Si nena, lo siento- digo rodando los ojos, en todo caso Selena no me puede ver
- Pero es que Justin, me prometiste estar aquí hasta que termine la película. - me dice con su voz chillona del otro lado de la línea
- Lo se, ¿pero que quieres que haga? No me quedo de otra.
- Ay por Dios, ¡eres mayor de edad!
- Eso díselo a ellos- grito molesto- mira, ¿Sabes qué? Esperaba un poco de comprensión por tu parte, a fin de cuentas soy yo el que esta aquí solo ¿no? - ella se queda callada- ya me lo parecía- resoplo
- Cuando termine de rodarla, me tomaré un pequeño respiro para ir a verte ¿esta bien?
- Lo que quieras- le digo cortante y ya me la imagino rodando los ojos
- Ni siquiera pudimos despedirnos como Dios manda- dice con voz seductora
- Lo se, nena. Pero podemos pasarla bien por aquí ¿no?- le digo pícaro
- Me encantaría, baby, pero no puedo. Estoy en un lugar público
- Pues vete a lugar privado
- No puedo simplemente irme del set, Justin- dice odiosa
- ¿Pues para que coño sugieres nada?
- Yo no sugería nada- se defiende- solo dije que me hubiese gustado despedirme bien de ti
- Esta bien, si, lo que sea. Voy a colgar- la escucho resoplar
- Adiós, baby
- Si, aja, luego hablamos- y cuelgo.Tiro el móvil a un lado, mi relación con Selena no es precisamente la mejor, los únicos momentos en los que estamos bien es follando. Y los pobres ilusos de la prensa ya están hasta preparando nuestra boda. Nunca aclaro esas cosas, los dejo que crean y sigan alimentándose con esas tonterías, para que después el tiempo les calle la boca y se tengan que tragar las palabras dichas quedando mal ante otros.
Miro a mi alrededor, solo llevo 24 horas aquí y me quiero ir, desde que llegue ayer no me he dignado a salir de la habitación más que para comer algo, sé que tarde o temprano tendré que salir allí y encontrarme con conocidos, mis supuestos amigos y la asquerosa traidora. Sin contar las fans que cuando me reconozcan y sepan donde estoy estarán acosándome. Aunque en este barrio ya me tienen más que visto, un punto a favor.
- Justin, baja- me pide mi madre- Scooter se va
- Adiós Scooter- grito desde la habitaciónEscucho a mi madre refunfuñar por mi “mala educación” y me burlo, al diablo con ella y con todos. ¿Quién los manda a traerme aquí? Me asomo al balcón para tomar el aire, parece un buen día, pero no pienso salir a disfrutarlo. Siento a Scooter ponerse a mi lado mirando las calles como yo.
- ¿Qué?- le pregunto de mala manera
- Cuando te conocí supe que llegarías lejos- ruedo los ojos- no, espera, no te soltaré ningún discurso, solo quiero que sepas que lo has conseguido. Has conseguido todo lo que soñaste y más, incluso los que otros sueñan- dice guiñándome un ojo refiriendo al tema chicas- y ahora que lo tienes, eres tú quien decide si lo mantiene y sigue creciendo como persona y artista, o lo echa a perder.
- Scooter…
- No, solo piensa en ello. ¿Lo harás?- yo le miro a los ojos y termino asintiendo- cuídate mucho ¿vale?- el se acerca mi y me abraza- y cuida de tu madre, ella sufre mucho, Justin, piensa en todo esto.
- Esta bien, cuídate.Me separo de él y lo veo salir de mi habitación, poco después lo veo salir por la puerta de casa, él mira hacia arriba y se despide con la mano, ruedo los ojos con una sonrisa y le correspondo el gesto. ¿Acaso tiene razón? ¿Estoy haciendo las cosas mal? Sé que quizás últimamente he sido muy grosero con algunas personas, incluso con fans aunque siempre a ellas les muestro mi mejor cara, si que ha habido veces que las he ignorado o pedido que se le alejen de mí de forma grosera, sé que me he estado juntando con gente de Hollywood que no tiene precisamente la mejor reputación, pero ¿eso significa acaso que voy a perder todo lo que he ganado? Sacudo la cabeza, no, claro que no. Cuento con el apoyo de muchísima gente, que unos dejen de apoyarme no siempre es del todo malo. Así te das cuenta de quienes son los verdaderos.
- Justin- dice mi madre entrando por la puerta, me doy media vuelta para mirarla y ella se acerca a mí- ¿Cómo estas?
- ¿Tu como crees que estoy, ah?- le respondo grosero- estoy pensando seriamente que me odias.
- No digas eso, tú eres mi hijo y te quiero más que a na…
- Ay, mira mama- digo interrumpiéndola- no me vengas con cursilerías ahora, no estoy de humor.- ella se queda callada mirando a otro lado y noto su nerviosismo- ¿Qué pasa?
- Nada. - hace una pequeña pausa- bueno… he quedado con Emily. Mejor dicho, hemos quedado.
- ¿Emily? - pregunto queriendo que me diga que no es quien pienso
- Si, Emily Garber, mi amiga de toda la vida, Justin. Quedamos de vernos esta noche, todos.
- ¿Todos? ¿Qué todos?- pregunto temiéndome lo peor
- Nosotros… y su familia.
- ¿Su familia?
- Si, su esposo y su hija- dice mirándome temerosa, yo aprieto los puños con fuerza.
- No voy a ir
- Justin, le dije que irías, además, tiene muchas ganas de verte.
- ¡Me importa una mierda!- exploto- no pienso ir.
- ¿Por qué no? ¿Acaso tienes miedo de algo?
- Yo no tengo miedo a nada- digo entre dientes con rabia- pero no quiero ir.
- Pues lo siento, pero vas a ir.
- ¡Maldita sea, mama! ¿Por qué no lo entiendes?
- Lo entiendo- murmura- entiendo que no quieres ver a _______.
- Entonces, no me hagas ir.
- Es solo una cena, Justin
- Arg, esta bien- le grito- iré a tu maldita cena si es más importante que yo
- Justin…
- ¡No! Déjalo así, ya me da igual. Si tantas ganas tienes de que vaya, esta bien, iré. Pero después no me culpes de lo que pueda pasar allí.