Capitulo 7

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No soy dueño de sailor moon.


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Darien regresó a la mansión para encontrar dos limusinas blancas sentadas frente a la casa. Los seguidores de Mina se habían disuelto y los terrenos estaban quietos, con la excepción de los guardias. Darien dejó que su poder fluyera hacia afuera y alcanzara los terrenos, ya no sentía la presencia de Mina, pero sentía otra, más amenazante. Darien entró tranquilamente en la casa con una mirada mortal en su rostro.

Estaba caminando por el pasillo principal hacia la sala de reuniones cuando Rei lo alcanzó. "Llegaron solo una hora después de que te fueras, papá los invitó a hacer negocios, creo", dijo cuando llegaron a las puertas de la sala de reuniones. Cada uno abrió una de las puertas y se detuvo en el umbral.

En una de las grandes sillas negras al otro lado de la mesa de cristal frente a ellas se sentaron Diamond y sus dos guardaespaldas. Su cabello blanco hacía juego con su chaqueta blanca y pantalones blancos; sus ojos azules eran las únicas cosas de color además de los diseños celestes en su chaqueta. Se sentó con los dedos entrelazados y la barbilla apoyada en ellos, sus ojos azules claros miraban los oscuros de Darien.

El guardaespaldas de la derecha era un hombre de aspecto cubano, muy musculoso y de aspecto muy peligroso. Darien se dio cuenta de que solo tenía unos cientos de años. El guardaespaldas de la izquierda era de piel negra y con cicatrices en toda su cara, también era musculoso y tenía el mismo aspecto peligroso. Sin embargo, Darien sabía que este era mayor, casi tan viejo como él, pero no tan poderoso.

"Hola Endymion, Rey de los Valcors", dijo en tono burlón.

"Diamond" fue todo lo que dijo Darien; Luego se sentó directamente frente a Diamond. Rei se sentó a su lado y Vincent se sentó junto a Darien. "¿Por qué estás aquí?" preguntó Darien.

"Tengo información importante para usted", dijo, "el consejo de Romulen llegó hace solo unas horas". "Actualmente se están quedando en la mansión Romulen al otro lado de la ciudad", dijo.

"¿Por qué nos das esta información?" Rei preguntó sospechosamente.

"Bueno, con esta información podrías hacerles mucho daño, lo suficiente como para ganar esta guerra", dijo. "Ustedes con sus tropas y la mía podrían trabajar juntas para derribar la casa".

"¿Cuál es el truco?" Darien dijo que sabía muy bien que Diamond no les daría información valiosa a menos que hubiera algo que quisiera.

"Solo quiero una cosa pequeña".

"¿Qué?" Preguntó Darien.

"La Reina de los Romulens, Serenity", dijo Diamond. Ante la mención del nombre, Serenity Vincent giró la cabeza para mirar a Diamond. Todos lo miraron, pero después de unos segundos, Darien comenzó a hablar.

"¿Para qué la quieres?"

"Ella es de gran importancia para mí, la he imaginado desde que la conocí cuando ambos éramos jóvenes", dijo.

"No" dijo Darien.

Vincent lo miró con una expresión inquisitiva y enojada. "¿Qué?" Dijo Diamond, con un toque de sorpresa en su voz.

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