Unica parte

1.2K 101 33
                                    

Jungkook se definía con tres simples palabras

Simple

Tranquilo

Inesperado

Todo un chico relajado, cursando apenas su segundo semestre en Artes, en una de las mejores universidades del país con una beca del casi cien por ciento por sus asombrosas calificaciones.

Pero sinceramente ¿Quien se lo creería?

Jungkook siempre ha llamado la atención. No por mala conducta y mucho menos vandalismo. Si no más bien porque era diferente.

Por supuesto, a menos que lo conozcas, creerías que es todo un criminal

Brazos totalmente tatuados, uno que otro piercing por ahí, una musculatura intimidante y un rostro tan sexy que tan solo inspiraba poder, liderazgo y empoderamiento

Totalmente irónico ante los ojos del chico, ya que era todo un muerde almohadas

Jungkook siempre dio de qué hablar, y no había nadie en la ciudad que no conociera su nombre. Jungkook, el chico de mala apariencia pero excelentes notas. Jungkook, el delincuente que obtuvo una beca para una de las mejores universidades del país. Simplemente, no había manera de que pasara desapercibido

Pero realmente, él no era un criminal. Tan solo por un par de tatuajes encima, ya lo habían tachado de maleante, y para demostrarles que no le importaba lo que dijeran de él, llenó su brazo en tinta, aumentándole más a ese efecto intimidante que tenía sobre las personas, cuando en realidad, para su mejor amigo Hoseok, Jungkook no era más que amor y ternura, y tal vez un poco de malcriadez en una misma persona.

Siendo él, justamente la persona con la que hablaba en ese instante por teléfono, mientras el castaño se dirigía a su tatuador de confianza, para un par de retoques sobre aquella ave que reposaba desde el inicio de su hombro, ocupando todo su pectoral derecho

Un tatuaje especial, realmente especial

– Hyung, ¿Es enserio? Pensé que vendría por mi, y así iríamos a comer juntos cuando terminara con mi tatuaje – bufó el muchacho al teléfono, mientras su mejor amigo, un poco desesperado por el tiempo que le quedaba, hablaba apresuradamente

– Lo siento mucho, Jungkookie. Pero olvidé que hoy era el cumpleaños de Yoongi, y en verdad quiero hacer algo especial por él, porque creo que ya se enojó conmigo – Contestó su amigo

– Pero Hyung... – Suspiró el más joven – Usted lo prometió...

– Lo sé, y lo siento. Prometo llevarte a donde quieras este sábado ¿Te parece? Una salida de amigos, como las de antes – Ofreció Hoseok al otro lado de la línea

– Está bien... Pero esta vez no podrá huir Hyung – regaño el más joven, haciendo reír a su compañero – Ah... realmente estoy celoso de Yoongi-Hyung por tener un novio como tú

– ¿Acaso te gusto, Jungkookie? – Bromeó Hoseok al otro lado de la línea, haciendo que Jungkook negara en desespero, haciéndolo reír – No deberías de sentirte celoso, Jungkookie. Además, ya es momento que dejes toda esa timidez que te cargas y salgas a conocer a más personas. Tal vez encuentres a una que otra persona que te interese más allá de lo que crees. Arriésgate

– No lo sé, Hyung... – Jungkook visualizó la tienda a unos pocos metros y supo que ya era su momento de cortar – Lo pensaré ¿Vale?. Me tengo que ir, ya voy a entrar, y no creo que quieras llegar tarde a tu sorpresa para Yoongi

Escucho como un amigo exclamaba una maldición, dándose cuenta de la hora y se despedía de su amigo amorosamente. Jungkook suspiró y guardó su teléfono en la mochila que cargaba a sus espaldas con todas sus pertenencias de la universidad, de donde recién salía de clases, para luego entrar a la tienda y reconocer fácilmente a su fiel tatuador

Tattoos [One shot - Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora