Lo último que pensaria es en guiarme en las palabras de los que se hacian llamar "familia". No estaban dispuestos a alimentar una boca mas en esa casa. Tuve que decirles que abortaria para que me dieran el dinero, pero escape con él por no tener el valor de sacrificar a una criatura que ahora esta en mis entrañas.
//////////////meses antes-///////////
-aghhagghaggh ME CORRO!!! AHH...- dijo el mayor con pelo negro y unos mechones claro a lado izquierdo de su cabeza.-eres exquisita. ..
Él desgraciado de hoy es un cliente habitual. Por lo general deja buena propina y es educado, algo que no se encuentra en el mundo bajo de la prostitución.
-quiero otra ronda RuuRu -dijo lamiéndose los labios para darle camino a otras envestidas en otra posición.
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Dicen que tener un bebé es una felicidad eterna, un milagro y regocijo en el corazón, pero fue duro para mi, trate de no perderlo en todo momento en esos nueve meses.
Él al nacer fue como encender una luz en un pozo, fue mi esperanza, mi salvación. Me llenó de emoción, y aún sigo pensando en que hubiera ocurrido si en esa ocasión abortaba.
Todos los día me mira con una sonrisa en su carita que hace que mi dia sea el mejor, apesar de que mi trabajo sea uno de los más asquerosos.
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Al terminar mi martirio con ese cliente me dispuse a ir a casa. Pero tenia un mal presentimiento en mi pecho. Desde esta mañana, no sabia de que se trataba pero ciertamente era horrible.
Y ocurrió: un terremoto.
Al principio me asuste mucho por mi hijo, pero esta con una señora que lo cuida de sabe que hacer en estos casos.
-Pero el movimiento continuó por largos minutos, se escuchaba que las personas se volvian locas dentro de las casa, hasta que paró-
Corrió los que más le dieron sus botas hasta llegar a la casa, vio la puerta entre abierta y entró. Vio a su hijo en el suelo y ella haciendole reanimación.
Su hijo estaba al borde del abismo.
Su salud. Mi vida.
