Capítulo 11

5 1 0
                                    

Y aunque las personas se hacen daño no queriendo, solo sin querer. Entendí que ella no me lo hacía de la forma en cómo me hacía sentir.
Era inevitable no sentir algo por ella, era hermosa, lista y carismática, era todo lo que necesitaba para ser feliz, ella era todo lo opuesto a las demás ya que se distinguía de un mar de estrellas.

Mishel no me llamo para ir a clases, y cuando llegué al colegio su asiento estaba vacío, espere las siguientes horas a que apareciere pero nunca apareció, para el momento del receso. Para educación física tome mis libros y deportivo para ir a los vestidores y cambiarme.

Ella llegó al final de la clase y se sentó castigada en las butacas porque no tenía shorts, hacia mucho sol y Mishel tenía bufanda y los brazos con una campera azul, supongo que de su novio el orangután de Erick  ya que este le quedaba muy grande. Me limite a observarla, a sentir sus ojos sobre mi, estaba triste de no poder hacercarme a hablarle, pero creo que si ella hubiera querido hablar conmigo me lo aria saber.
Para cuando llego el siguiente horario de clases vi en mi pupitre una nota. Era pequeña y aderible, de color amarillo y con una letra carta que estaba preciosa, _lamento no a verme acercado, no me siento del todo bien, besos  Mishel_, solo una nota y nada mas, prefería mas la frialdad que tenia sobre mi que esa nota sin nada de tacto, no entendía el porque me molestaba tanto.

Toda la noche redacte un ensayo de 500 palabras sobre la segunda guerra mundial para mi proyecto de historia, mis padres celebraron su aniversario en un lujoso restaurante, por otro lado mi hermana salio con sus amigas al cine y era perfecta tener la casa sola, parte de mi reseña se trataba mas del punto de vista de como un dictador pudo organizar la guerra a base de poco ingreso económico, entonces escuche que alguien lanzaba piedras a  mi ventana, me asome y vi que era ella, Mishel.

-que...que..fu..fue lo que pa...pa..so?- pregunte aterrado, no paraba de llorar y tenia as manos cortadas y ensangrentadas, se sentó en mi cama y fui por el botiquín de primeros auxilios , cure cada una de sus heridas, algunas eran profundas y se limito solo a mirar y sollozar pausadamente, no sabia que había pasado, y aun que seguía molesto con Mishel, el tenerla ahí para mi era hermoso, no me importaba nada mas que ese llanto desconsolado, quería tenerla y protegerla por siempre, debía estar para ella y ayudarla de todo, pelear sus batallas, ella era frágil, dulce e inocente. Las siguientes horas estaba puesta una sudadera mía, un buso limpio y medias que saque del armario, su cabello le cubría medio rostro y solo levante la mitad para ver mas de ella, tenia la piel suave, y aun que sus mejillas estaban ta rojas como su nariz se seguía viendo hermosa, respiraba y de momentos  podía escuchar susurrarla una canción. Trataba de terminar mi ensayo cuando después de una hora y media escuche como se levantaba, me di la vuelta y le pase un vaso con agua en cuanto se sentó, -te...te...sientes me...me...mejor?- , tomo el agua se froto con la manga sus ojos y se recostó en mi hombro, entonces se durmió nuevamente, no quería incomodarla , no quería estorbarla , entonces me acomode  a su lado, debo confesar que su respiración era lenta y mas segura, los latidos de su corazón eran regulares , lo podía sentir en mi pecho, entrecerré los ojos y sin darme cuenta estaba sumergido en ella, en su esencia, compartiendo un sueño, mi sueño y siendo cómplice de los suyos. 

Me levante de madrugada, ella me abrazaba y me di cuenta que mis padres no sabría si habían  llegado, me levante con cuidado y  tape a Mishel, me lave la cara me puse mi pijama y salí la pasillo, las luces de mis padres estaban apagadas, sabia que estaban en casa, porque solo abren la puerta cuando están fuera de casa y esta estaba cerrada, por otro lado mi hermana deja siempre entreabierta y duerme con una lampara encendida ya que tiene miedo, y aunque ya esta en edad de superarlo, aun sigue con esa costumbre. Regrese a mi cuarto y Mishel estaba parada frente a la ventana, me asuste por un segundo entonces se dio la vuelta y me dijo -escapémonos-, estaba desconcertado, acaso era sonámbula? se me paso esa idea por la cabeza - hoy no tenemos clases, me refiero, vayámonos lejos- se acerco a mi y se veía desesperada -tomare unas cosas y nos veremos en media hora afuera de tu casa-,ella estaba triste y por la forma en como me decía, se notaba que quería escapar, pero de que? -en...me..me...media hora, pa....pa....pa...sare po...por...por..ti- dije , ella me sonrio y me dio un beso calido en la mejilla y se fue.

Mil y un pasos amorOù les histoires vivent. Découvrez maintenant