"Tú tan fuego y yo tan decidido a quemarme" David Sant.
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Después de una dolorosa ruptura con su ex, Amalia cree que encontrar nuevamente el amor es un hecho imposible, por eso prefiere disfrutar al máximo y no preocuparse.
Hale...
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Maraton 1/7
En el capítulo anterior
Pienso al encontrarme a solas con Bárbara quien voltea dándome la espalda y antes de empezar a caminar dice- recuedar cuál es tu lugar en esta empresa Sandoval y olvidate de los cuentos de hadas.
- yo...
Intento aclararle pero continúa hablando- aléjate del señor Muller Amalia para que luego no te cargues de problemas.
Actualidad
- Tu amigo te busca en recepción -alzo la vista para ver Adriana entrar a mi oficina- se supone que me pagarías el almuerzo -se cruza de brazos indignada.
- Lo sé -guardo los archivos y apago el ordenador- no sabía que vendría -recojo mis cosas algo extrañada.
¿Cómo supo donde trabajo? Durante el tiempo que hemos compartido no le había comentado nada acerca de mi trabajo aunque creo que Louise tiene algo que ver.
- Aun no me has dicho nada sobre porque el señor Muller se fue de una forma tan repentina -tomo mi celular y monedero para salir junto Adriana de mi oficina.
Frunzo los labios al escuchar su pregunta pero le respondo- se fue porque tenía que viajar por negocios.
- ¿así de repente? -alza una ceja incrédula.
Caminamos por el pasillo una al lado de la otra, los cubículos están algo despoblado debido a que la gran mayoría está almorzando.
- Si -respondo cortante.
Nos detenemos a esperar el ascensor- ¿y sabes porque la jefa está que arde? -se acerca para bajar la voz.
- No hay nadie cerca, no tienes porque bajar la voz -le informo algo sarcástica.
- Se molesto por lo del señor Muller -respondo en cierta manera mintiendo pero librándome de su cuestionamiento. - ¿pudiste hablar con él al menos?
Niego- ¡qué no joder! -Entramos y presionó el primero piso de mal humor- maldigo la hora en la que te olvidaste de James, Las conversaciones eran menos insignificantes cuando sólo hablabas de él.
Ella rueda los ojos- sólo quiero ayudarte.
- ¿pero en qué? En ningún momento he dicho que quiero algo con Muller.
- ¿Por qué estas tan molesta? -me enfrenta- sabes que, olvida lo del almuerzo.
Ella no es la culpable de mi frustración no debo comportarme así. Aunque si no hubiese sido por su idea no estaría en este estado.
