Citas Inesperadas - Justin Bieber y tú

{Abre los ojos}

-¿Es difícil tu trabajo?- dijo Justin, mientras tomaba un sorbo del chocolate caliente que ______ había preparado. 
-No. Sólo algunas veces, como cuando tienes que decir muchas cosas y tienes mucha audiencia, ¿El tuyo, lo es?
-Es cansador, a veces, pero lo amo. Sin la música no sé qué sería de mi vida.
-Yo no canto, pero sí se bailar.
-¿En serio?-dijo Justin incrédulo.
-¡Claro! En la escuela era muy buena.
-¿Y ahora que paso, anciana?-rio Justin.
-Eres un infantil-dijo ______ tirándole una almohada en la cara.
-¿Desde cuándo no bailas?
-Desde que...desde que paso lo de Jared-dió un sorbo largo a su taza, a lo que Justin se tenso. 
-Bien, pues hoy es tu día de suerte.
-¿Ah, sí?
-¡Sí!-le sonrió- hoy volverás a bailar.
-¿Y con quién?
-Con el mejor bailarín de todos los tiempos.
-Michael Jackson está muerto, Justin.
-Con él no- le devolvió el golpe con la almohada- Conmigo- dijo Justin decidido a lo que ______ escupió gotas del chocolate caliente que tenía en la boca.
-¿Pero qué dices?-rio- Estás loco.
-¿Por qué? ¿No quieres volver a bailar?
-Sí, pero no podemos. No tenemos música ni un lugar donde bailar.
-¡Yo conozco el lugar perfecto!-exclamo el rubio animado-.Vamos, ahorita que ya esta anocheciendo lo han de estar cerrando. Pero el dueño es un gran amigo mío y me lo dejara para nosotros.
-¡Pero mañana empezamos con el trabajo Justin! Tenemos que descansar.
-Solo será una hora. Además, apenas son las 7-la miro a los ojos, rogándole con la mirada.
-De acuerdo- suspiró ella. 
-Vamos, te prometo que no te arrepentirás-la tomo de la mano y haló hacia la puerta.

Ambos salieron de su departamento rumbo a un estudio de baile que Justin conocía. Cuando llegaron las luces estaban apagadas y Nathan, amigo de Justin y dueño del estudio, estaba saliendo.

-Espera aquí-ordeno Justin a ______ y salió del auto rumbo a su amigo.
-¿Justin, eres tú?- preguntó el pelirrojo, entrecerrando los ojos por la sorpresa. Había pasado mucho tiempo desde que se habían visto.
-Nathan, es un placer volver a verte-lo abrazó.
-Hace tanto que no te veía, pero cuéntame qué te trae por aquí.
-De hecho venia a pedirte un favor.
-Dime, ¿En qué te puedo ayudar?
-Venia a pedirte prestado el estudio.
-Claro, con gusto. ¿Para cuándo lo vas a querer?
-Hoy-rió Justin.
-¿Hoy?- lo miró asombrado su amigo.
-Sí, hoy. Por favor. Dame las llaves y yo cerraré todo, te lo prometo. Te dejaré las llaves en la maceta de la entrada.
-¿Pero, para qué lo quieres hoy? pregunto confundido.
-Es que, traigo a una amiga. Y ella no ha bailado en mucho tiempo, y está un poco triste, sólo quiero que se olvide de sus problemas por un momento.
-Con que amiga, eh Bieber-golpeó el hombro del rubio con cara de orgullo.
-Vamos Nathan, es una amiga. Sólo eso.
-Bien, sólo te lo prestaré porque hoy estoy de buen humor.
-Muchas gracias hermano- lo abrazó Justin.
-Ya sabes, apagas todas las luces excepto las del salón que van a ocupar. Cierras bien la puerta principal cuando estés bailando y cuando te vayas-le entregó las llaves, y se fue rumbo a su auto- ah, y Justin.
-¿Si?
-No quiero nada de "cariñitos" en mi estudio eh, ya sabes a lo que me refiero.
-Nathan, eres un idiota. No lo haré en el estudio, lo haré en tu oficina. En tu escritorio.
-¡Justin!-gritó Nathan intentando, sin éxito, sonar enojado.
-Sólo bromeaba- rió Justin-gracias.

Nathan se marchó mientras Justin iba por _______.

-¿Lista?
-Claro-Exclamó ella. Salió y Justin le tapo lo ojos.
-¿Lista para volver a la preparatoria, anciana?-le susurró al oído.
-Verás que esta anciana sabe moverse mejor que tú. Además, tú eres más grande que yo, en realidad.
-¿Acaso eso fue un reto?
-Sólo es la verdad- rió  mientas seguía caminando con las manos de Justin en sus ojos.
-¿Qué quieres bailar?-
-No lo sé. ¿Tú?
-Sinceramente estoy algo cansado para bailar algo movido. Preferiría algo lento- contesto Justin sin pensar. Apretó los ojos maldiciendo en su mente, no quiso que sonara como indirecta pero vaya que sonó como tal-Lo siento- se disculpó.
-No hay problema. Después de todo, ¿somos amigos, cierto?
-Cierto. Hemos pasado por cosas muy feas. Hoy todo quedará en el pasado. Hoy nada más que la música y nosotros existirá. Hoy volveremos a empezar, ¿te parece bien?
-Perfecto -sonrió.
-Ya llegamos-dijo él, destapándole los ojos.
-Es gigante, Justin- dijo ______ con la mirada de un niño en Navidad.
-Sabía que te gustaría- sonrió orgulloso.  

Cerró la puerta con seguro y corrió las cortinas para que nadie los viera dentro del estudio. _______ se movía recordando algunos de sus bailes mientras Justin conectaba su celular a las bocinas. 

-¿Que canción bailaremos?-pregunto ella intrigada.
-¿Has escuchado Turning page de Sleeping at last?-
-Si, claro que sí. La baile la noche de mi graduación.
-Siempre quise bailar esa canción con alguien. Pero Selena nunca tuvo tiempo de bailar una pieza conmigo- dijo triste.
-Hoy nada existirá más que la música y nosotros- dijo ______ imitando sus palabras con una tierna sonrisa . 

Justin la vio a los ojos, y no pudo entender cómo Jared le pudo haber hecho eso. Cómo a esa criatura tan inocente y débil la pudieron lastimar de tal manera. Le sonrió difícilmente, se levanto y preparo la música.

-Hoy terminará el dolor-dijo ofreciéndole la mano a ______, a lo que ésta la tomo-¿Estás lista?- preguntó nervioso. Ella suspiró, tragando saliva.
-Sí- dijo cerrando los ojos.

Justin la tomo delicadamente de la cintura, a lo que ella sintió un escalofrío recorrer su espalda. Al sentir como un hombre tocaba su cintura, era como volver al pasado, al horrible pasado; pero no quería huir de nuevo, quería ser fuerte, quería recuperar por lo menos una noche la confianza en las manos de un hombre. ______ movió temblorosamente sus brazos por detrás de la nuca de Justin, seguía con los ojos cerrados y la música empezó a sonar. Justin la apego más él. Ella se tensó y los nervios de Justin aumentaban. 

-Abre los ojos- le pidió Justin, en un hilo de voz.
-¿Para qué?
-Para nunca olvidar este momento.

Los pelos se le erizaron, abrió lentamente los ojos y se encontró a Justin, con una profunda mirada. Una que jamás había visto en alguien al bailar. Se empezaron a mover lentamente al ritmo de la música. Y ahí se encontraban los dos, olvidando todos y todo. ¿Qué mejor manera de sanar heridas que bailado? Mucho mejor bailando con una persona que aunque no haya tenido el mismo problema que tú, sabe lo que duele cuando el amor te traiciona. Él, con sus manos en su cintura, viéndola a los ojos como nunca pudo ver a Selena. Y ella, jugando con sus cabellos como nunca lo había hecho con Jared. 
Cualquier persona que les hubiese visto bailar como lo estaban haciendo ellos, hubiera pensado sólo una cosa, y no seria que fueran mejores amigos o hermanos. 
Pero la pregunta en este momento era... ¿Cómo se veían el uno al otro? Ni ellos sabían lo que veían en el otro. Aquello se estaba convirtiendo en más que un baile para olvidar el dolor; se estaba convirtiendo en una cita inesperada.