Pandora's Actor

(Corrupción 0%) Encontrado

Dentro de cada sujeto se privan mil sentidos, en consecuencia, los deseos reprimidos de las personas toman una forma peculiar, saliendo con desenfreno ante cualquier oportunidad, de aquí el dilema de la infidelidad, a veces dada por insatisfacción, pero en muchas otras ocasiones es por un padre aventurero o una madre que vive su vida a lo que ella desea. Seamos sinceros los humanos somos personas, y como personas, convivir con otras es un asco que muy pocos soportaran.

Eran las 12:15pm y aun me conseguía plantado en la cama, sin ninguna razón para salir realmente, aún sigo en preparatoria, pero ir nunca se me puso como primera razón del día. Si voy ahora quizás llegue a la antepenúltima clase, y vea de reojo a mis compañeros, salude a la chica gorda de la clase y luego me rematen los profesores por mi ausencia. Un día común. Mis padres poco en cambio se muestran despreocupados ante mi "repentina decadencia" o como lo llamaba mi psicóloga "Pubertad Retrasada", parece ser que es común a mis tempranos 17 preocuparme por cosas más trascendentes, como lo es; "¿Por qué demonios debo ir al instituto, si de igual forma no vale la pena?", pensar que; "Claramente mis padres le prestan más atención a su vida privada que a mí, así que para que preocuparme" o decaer por cosas como "Es la undécima vez que me afeito los huevos esta semana y no dejan de salirme pelos"... podemos ignorar lo último.

Mi vida consistía hasta ahora en retomar una extraña rutina que me había montado desde secundaria, levantarme temprano, apreciar el hecho de que mis padres duermen cada uno en casa de su respectivo amante, aunque yo todavía no he podido zafarme de la paja, hacer un desayuno simple, aunque en aquella época tiraba desde la puerta de la cocina el huevo para no quemarme con el aceite y le dejaba friéndose mientras estaba apartado. Y después de todo eso ir a la escuela... no me malentendáis vale, no tengo una razón específica para odiar salir a la escuela, si no muchas. Una era la insistencia de las profesoras en saber sobre mi vida privada o de mi padre en general.

(A continuación, un dialogo breve de mí y la señora Brugess una mujer de 34 años que enseña matemáticas)

"¿Tu padre tiene esposa cierta?"—Preguntaba, aunque claramente sabía que si... y era mi madre. "Claro, felizmente casado, con la mujer que ama, y me tuvieron a mí un símbolo claro de su amor" –Dijo el yo de 11 años con un sonido de esperanza en su voz, esperando que esas palabras sean ciertas, "Luvi, no deberías ser tan cortante con las mujeres, no serás popular ¿sabes?" – Tranquila profe no lo seré de igual forma (Decía mi yo actual). "Sabes podría ayudarte con tus tareas en casa si me lo pidieras" –Y allí estaba una cuarentona pidiéndole a un niño que la lleve a casa, ¡Señor Policía!, claramente, aunque mi deseo de irme a patas de allí era tan grande como las ganas de acostarse con mi padre de su parte, no podía, esa mujer me tenía donde quería, había reprobado el examen de cuartos de final y no podría graduarme si no lo pasaba. Dada nuestras posiciones de desesperación repuse con, "Quizás mi padre esté interesado en que reciba clases privadas, aunque no me quitara el ojo de encima mientras suceda" --Respondía con un tono de derrota y altruismo en mi voz, claramente lo que dije era mentira, pero por otro lado... quizás pasaría mi materia y me graduaría.

Después de aquello mi profe fue arrestada por una demanda anónima que casualmente fue de un numero de mi cuadra, de mi calle, y desde un teléfono desechable desde mi casa, aunque la policía no indago realmente. Encontraron a la profe apunto de "violarme" o eso dije yo, después de aumentar la calefacción para que desabrochara su blusa por el sudor y dejara a la luz su promulgado escote. Desde entonces fui molestado con el apodo "Honguito" por un extraño rumor de que mi pene era como uno... creo que todos son como un hongo, es decir... (Suspiro). En indiferencia otra de las razones por el cual ir a la escuela era horrible era el extraño bullying que vivía a mi alrededor y que yo, a veces, sufría. Por alguna extraña razón que aún no entenderé los "gallos" ("Así los llamaremos a los retrasados que molestan con solo respirar") claro más altos, formados por no decir gordos de mierda, y más viejos que nosotros, se formaban en círculos para no dejarnos salida, y siempre estaba el rarito del grupo que pedía que nos desnudáramos... en verdad que diablos con ese tío, quiero de decir, claramente tu homosexualidad salía a relucir en esos momentos, aunque entre risas se disimulaba bastante bien pero entre tantas cosas que podríamos hacer.