¿Cerezos en invierno?

Carta 02.

"Decidí no continuar más. Sí, voy a escribirte lo que pienso y no, claramente no espero una respuesta. Menos pienso que esto llegue a tus manos. Por eso mismo que hago esto como forma de alivio para mostrarle a alguien cómo me siento. No me importa quién lo lea porqué nadie sabrá quién soy. Dudo también de que sepas quién soy como me autocuestiono mi existencia también, así que supongo que es algo difícil reconocer mi persona.

Vengo con una propuesta, la cual no sé en qué momento mencione por la verborragia que cargo. Estos días aislado no son diferentes a los otros. No tienen nada de especial ya que siempre viví así. Tampoco me hacen pensar como antes. La soledad ya no la veo como un factor de negatividad. Me nutro de ella en demasía y encuentro, una vez más, arte en ella. Y sí, "una vez más" porqué había dejado de tener esa sensación. La sensación de sabiduría y buen pensar por estar sólo. Comprendí que uno puede ser mucho si se lo propone, estando solo o rodeado de gente. Miento al decir esto porqué no me siento de aquella manera todo el tiempo, pero el uno por ciento del año sí lo hago. Siempre surgen de la nada y sin que le pueda dar explicación alguna. Últimamente, no pienso tanto y soy capaz de sacarme las dudas ante otras personas y claramente, sorprenderme porqué no me sentí yo. Ese que no podía con nada y temía por todo, aún está aprendiendo a quererse a si mismo. Pero hoy no surgen lágrimas de mis ojos y puedo ser fuerte ante mis palabras.

Uno siempre, viéndose desde fuera, puede notar cómo las cosas no son tan difíciles. Ese plano estaba lejano a mi, y con ayuda, pude verlo. Así fue como mi percepción de todo fue mutando y puedo afirmar que también maduró de forma escalonada. Con muchos tropiezos, retrocesos, caídas y moretones. Pero la meta cada vez más se iría acercando.

Nadie sabe con precisión sus palabras. Nadie sabe sobre sentimientos. Y cuesta, cuesta a montones entenderlos. Una ayudita especial nunca pensé que encontraría, y sí, podría afirmar que es mi mejor amiga sin temor. Comprendí que la amistad no se basa en hablar cada día, saber cada mínima cosa y así. Se basa en estar. Si te digo que me siento mal, que estés como si te dijera que me siento feliz. Esa es una amistad. Que aunque pasen los días y no hablemos, al volver a juntar palabras esa conexión no se rompió y todo sigue igual de bien. Y ahí comprendés una amistad. Da todo a cambio de nada. Si se hace, se hace con amor y no intención. Intenta enseñarte aquello que te nubla y te aparta de comprender. Porqué sí, superé y entendí muchísimas cosas de ella a pesar de que fuese menor que yo, recalcando nuevamente que la sabiduría no es años, sino que aprendizajes. Pero el aprecio que le tomé y el amor, es irrompible. Sé que puedo contar con ella. Lo pude confirmar hace pocas semanas luego de conocerla por ya casi dos años. También podría afirmar que no creo en las almas gemelas como pares, sino que son muchos pedacitos esparcidos por el mundo esperando encontrar aquellos que los complete. Y mi amiga, mi mejor amiga, es uno de mis pedacitos."