3. Hermanos

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𝐶𝑜𝑚𝑜 𝑙𝑙𝑜𝑟𝑎𝑟 𝑎 𝑎𝑙𝑔𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑠𝑖 𝑛𝑢𝑛𝑐𝑎 𝑡𝑒 𝑒𝑛𝑠𝑒𝑛̃𝑜́ 𝑎 𝑒𝑥𝑡𝑟𝑎𝑛̃𝑎𝑟𝑙𝑎"

Bas  en serio terminaría vomitando todo la sala de la casa, volver a sentir ese olor peculiar a pino y manzana, aroma característico de su hermano Saint,

ver el lugar donde descargo todo su frustración y terminó aniquilando el poco amor familiar que quedaba entre ellos, todo era tan lindo y armonioso típico de Saint Suppapong, su medio hermano o eso decía su madre, el mayor que fue criado como él por las sirvientas mientras su madre hacía vida social,

El pobre Bas  estaba tan sumergido en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando una pequeña niña de 12 años se le acercaba y lo abrazaba por la cintura, sus pequeñas manitas lo apretaban para que reaccionara

𝗦𝗔𝗥𝗔: ¡Hermano volviste! , sabes que mis compañeras de la escuela no creen que tu y yo somos hermanos.

Bas  baja la cabeza y ve a una hermosa niña de ojos café claros muy representativos de su padrastro y los característicos labios rojos de su madre,

Como había crecido tanto, claro imbécil te fuiste cuando tenía 8 años deberías agradeces que ella aún te habla pensó Bas  en sus adentros,

Bas  se coloca a la altura de su hermanita acariciando su cabello, regalandole una hermosa sonrisa, baja su mano a la megilla de su pequeña y puede ver lo bella que era.

𝗕𝗔𝗦: Pues iré un día de estos a tu escuela para que vean nuestro presido.

𝗦𝗔𝗥𝗔: si por qué ellas me llaman mentirosa y p'Saint dice que las niñas buenas no dicen mentiras.

𝗕𝗔𝗦: eso es verdad, eres la niña más bella del mundo, así que no tienen por qué mentir o si

Dice Bas al tocar de manera cariñosa la nariz de su hermanita, la risa de su pequeña era como un bálsamo para todo sus problemas.

𝗦𝗔𝗜𝗡𝗧: Sara deja a Bas acaba de llegar, sube a tu habitación y descansa que mañana será un día bastante movido.

Sara mira a su hermanito dándole un último abrazo y dirigiéndose así Saint,

𝗦𝗔𝗜𝗡𝗧: Mandare a que te suban la cena, tu habitación fue limpiada, la ropa que debes usar mañana está en tu closet y por favor debes estar listo a las 9: a.m.

Sin más  que decir Saint de media vuelta y desaparece con su hermanita, Bas ve como ese frío ser que se acaba de ir alguna vez fue su protector y cálido hermano mayor.

Aquel que lo acurrucaba en las noches y le cantaba para que pudiera dormir, él que velaba por él cuando está enfermo pero ahora solo estaba esta joven frío y autoritario que movía las cosas a su antojo,

Cuando llegó a su habitación las lágrimas empezaron a salir por si solas el dolor de ver a su mejor amigo y no abrazarlo, ver a su hermanita tan grandes y la indiferencia de su hermano era solo el principio,

Bas sabía que pronto tendría que enfrentar a muchos, pero sobre todo a él, aquel hombre que no solo destruyó su armonía vida, sino también lo enloqueció al punto de tener que irse, escapando como un cobarde.

Lloro hasta quedarse dormino en la alfombra de su cuarto, estaba cansado y solo era el comienzo de su tortura.

De repente la puerta de su cuarto se habré y da paso a un joven de mirada suave y labios color cereza, su corazón se estrujo al ver a su pequeño niño en posición fetal tumbado en esa fría y dura alfombra.

The Four Flower BoysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora