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La semana había pasado rápido y después de clases Caín y LenJi seguían viéndose pero ahora las conversaciones eran mudas o al menos desde hace dos días.

Caín había notado como Klanhyun regreso a estudiar después de haber estado enfermo unos días y el aprovecho su oportunidad para molestarlo pero la broma se le fue de las manos y por no medir su fuerza estrelló al chico contra los casilleros de una forma poco amable.

No hubiera sido tan malo pues Klanhyun no parecía realmente herido, solo un poco conmocionado pero LenJi había visto la escena desde lejos y no tardó en venir corriendo y darle una patada en las pelotas para después llevarse a su hermano hecho una furia no sin antes decir un bonito Vete a la mierda, maldito hijo de puta.

Caín sentía que toda la mierda del mundo estaba sobre sus hombros pero no había realmente nada que pudiera hacer, por más que intentará entablar una conversación con LenJi este lo evitaba o simplemente le enviaba miradas llenas de frialdad.

Hoy iban a ir a un asilo cerca de su ubicación. Solo faltaban dos temas por preguntar, la homosexualidad y la sexualidad, lo demás solo sería cuestión de acomodar la información, hacer gráficas y sacar porcentajes además de la opinión personal.

Camino a la salida donde LenJi lo esperaba sin real entusiasmo.

Cuando lo vio llegar simplemente emprendió camino solo esperando que lo siguiera. Caín lo hizo, lo siguió todo el camino como un perrito buscando amor.

– Llegamos.

– Noo ¿Enserio? Que gran descubrimiento Einstein.

– Yo solo decía pero si realmente vas a estar con ese humor de...

Y cuando menos supo LenJi ya estaba entrando al asilo dejándolo hablando solo. Caín hecho la cabeza hacia atrás y suspiro fuertemente antes de seguirlo.

Ya adentro fueron preguntando a los ancianos sobre sus opiniones a los temas.

LenJi cayó rendido sobre uno de los sillones mientras el fue al baño, tenían dos horas preguntando y su garganta dolía de tanto elevar su voz para que los mayores escucharán bien lo que decía.

Cuando salió no pudo contener la risa al ver cómo LenJi era rodeado cómo por cuatro abuelitas que apretaban sus mejillas y reían a su alrededor mientras peinaban su cabello en una colita mal hecha, el pobre parecía querer decir algo pero no lo decía, estaba demasiado aborchonado de la situación.

Cuando LenJi vio que se reía una sonrisa maliciosa apareció en sus pequeños labios.

– Creo que el también quiere que lo peinen – Dijo con una sonrisa angelical mientras lo señalaba.

Antes de que pudiera negarlo ya estaba sentado en el sillón junto a LenJi quien reía a más no poder.

Cinco minutos después tenía su cabello amarrado en dos coletas. Las abuelas de habían ido cuando una enfermera al ver tanto alboroto las llevo a tomar un poco de té.

Una de las abuelas no se fue no sin antes decirle Cuida a tu novio, cualquiera te lo va a querer quitar

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Una de las abuelas no se fue no sin antes decirle Cuida a tu novio, cualquiera te lo va a querer quitar. Decir que Caín no se había confundido antes esas palabras sería mentir.

Después de un tiempo entrevistaron a la última persona.

– ¿Y usted que opina sobre la homosexualidad? – Pregunto LenJi queriendo acabar esto de una buena vez.

– Que está bien siempre que se amén.– Dijo la abuela con una sonrisa dulce.

– ¿Por qué? – Preguntó Caín está vez interesado, los otro ancianos habían respondido con indiferencia o con disgusto a excepción de aquella abuela loca que pensó que LenJi era su novio.

– Mi hermano menor era gay pero la sociedad no lo acepto y una noche simplemente lo mataron sin ninguna otra causa, mi hermano con tan solo 17 años murió a causa de una sociedad de mente cerrada, por no aceptar sus gustos y no ver qué el amaba igual que nosotros, que era un humano con sentimientos pero desde hace 50 años vivo con el recuerdo de una persona fuerte que no se escondió de la sociedad, lo recuerdo cómo alguien valiente que lucho hasta el final por su felicidad y nunca se odio así mismo por sus gustos como muchos en mi época lo hicieron. – La abuela termino de relatar todo eso con lágrimas en los ojos y una sonrisa melancólica se levantó disculpándose rápidamente por irse, camino hacia sus amigas y se unió con una débil sonrisa a ellas.

....

Estaban caminando hacia su casa, era de noche y el silencio reinaba entre ellos, antes de que sus caminos se separarán Caín tomo la mano de LenJi con seguridad reteniendolo en su lugar. LenJi lo miró a los ojos unos segundos con confusión antes de bajar la mirada.

– Lo siento ¿Si?, La broma se me fue un poco de las manos, no quería hacerle daño. – Caín sonaba arrepentido pero al parecer su disculpa no hizo más que hacer enojar a LenJi.

– ¿Es que no lo entiendes? No es a mi a quien tienes que pedir disculpas y más allá del daño físico son tus palabras lo que hieren a mi hermano, ¡Tu no eres el que lo escucha llorar por las noches por comentarios de mierda de gente mierda como tú!

Caín solo se callo unos segundos sin saber cómo exactamente reaccionar, el chico tenía sus manos apretadas en puños fuertemente y la cara roja de la furia.

– Tu solo eres un idiota – Continuo hablando LenJi ahora con la voz entrecortada y los ojos llorosos– t-tu crees que puedes ir por la vida hablando mierda y lastimando a los demás solo por gusto y no es así – El tono de su voz bajaba considerablemente con cada palabra – Son humanos al final del día y tienen sentimientos y cada una de tus palabras puede lastimar más de lo que imaginas ¡Así que no creo que con una disculpa se arregle todo!

LenJi estaba alterado y empezó a golpear el pecho de Caín sin verdadera fuerza mientras pequeñas lágrimas traicioneras salían de sus ojos.

– Te odio, te odio, te odio...

– Lo se así que por favor, deja de decirlo – Dijo Caín también con un nudo en la garganta.

Caín en algún momento lo rodeo con sus brazos y le hizo una prisión de calor sin aplicar presión pero realmente no la necesito, el más bajo simplemente se quedó ahí inmóvil mientras sorbia por su naríz.

Ninguno dijo nada, después de unos minutos se separaron y cada uno tomo su camino, solo la luna había sido presente de tantas emociones y entre ellas había una de la que ninguno de los dos sabía que existía.

Ninguno dijo nada, después de unos minutos se separaron y cada uno tomo su camino, solo la luna había sido presente de tantas emociones y entre ellas había una de la que ninguno de los dos sabía que existía

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Capitulo para pasar la cuarentena UwU

Esta vez fueron mil palabras, cada día me superó :'D

Solo espero que les haya gustado ya que me esforcé enormemente por traerles algo de calidad :3

Homofóbico (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora