Mi Otro Yo: Un Posible Futuro Sin Ti

Nuestro definitivo adiós

A la mañana siguiente, no había vuelta atrás era definitivo, no podía seguir con esto, me dolía más a mi que a los demás, era lo último que quería, pero no podía más, cada vez me maldecia por ser y estar en esta posición.
Me levanté con mucho cuidado de mi despertarlo, afortunadamente lo logré, llegué hasta la cosina, dónde prepare el desayuno para los dos, tenía planeado pasar un lindo día solo los dos como una gran despedida.
Fui al cuarto y lo ví descansar, se veía tan bien, tranquilo, llegué hasta su lado sentándome a su lado, dandole un beso en sus labios.

- Despierta, ya es de día.

- No quiero.

Sonreí por como actuó, me gustaba verlo así.

- Vamos, ya está el desayuno, además tengo un gran día planeado, solo para nosotros.

Entonces todo fue muy rápido, el se levantó y me besó.

- Solo los dos.

Repitió, con una sonrisa enorme en sus labios.

- Si solo nosotros.

- Bien vamos a desayunar.

Me levanté y el venía atrás de mi, sentía su mirada sobre mi espalda, el se pegó a mi y en el oído me susurro.

- Que hermoso mi Aki.

Me sonroje a más no poder y voltie mi rostro.

- N-no digas esas cosas de repente.

Le dije para después alejarme de él, para ir por las cosas a la cosina, llevando las a la mesa y empezar a desayunar.

Después de un desayuno muy rico y productivo, fuimos al cuarto a arreglarnos, en la ducha los besos y caricias no faltaron por parte de ninguno, en todo momento tratando de grabarme cada beso, caricias y gesto.

Al terminar nos dirigimos a uno de mis lugares favoritos, la playa, había llevado, lo necesario para los dos, y rica botana.

- Wooo que hermosa.

El me abrazo por detrás, recargando su frente en mi cabeza, respiro hondo.

- Cuando me lo ibas a decir

- De que hablas.

Me puse nervioso, no podía ser cierto, como lo había descubierto, no quería que esto fuera así y menos ahora.

- Sabes hay noches en las que no puedes dormir y lo dices todo.

No es posible me había escuchado, esa noche, no.

- Enserio no se de qué hablas Ryuchi.

- Si sabes.

Me voltio, y me abrazo, con dulzura y tanta ternura.

- Te espere tanto y ahora te perderé, como es posible.

- En realidad lo siento tanto, esto jamás estuvo en mis planes.

Le contesté.

- Pasemos un día juntos tu y yo, olvidemos todo lo demás y quédate junto a mi hasta el fin.

- Hasta el fin.

El día paso de manera tranquila, con juegos de parte de Asami, quien me permitió conocer esa parte de el ahora, pero demaciado tarde, no quiero hacer esto, no ahora, no hoy que se que pude haber tenido una familia feliz con mi peque y Asami.

- Es tiempo de volver.

Le tome la mano y el la yo entre la suya apretándola levemente, queriendo jamás soltarla.

- Un rato más

Me senté a su lado en la arena de esa playa, dónde el sol se ocultaba y con el, mis más grandes esperanzas.

Después de unos minutos el se levantó y camino a la playa, aventó una piedra y se dirigió a mi.

- Es hora.

Soltó con una sonrisa entre sus labios, eso me dolió en lo más profundo de mi ser.

- Si.

Me levanté, el volvió a tomar mi mano y nos dirigimos al auto, en el trascurso, el has soltó mi mano, al contrario la apretaba cada vez más.

Una vez en el departamento el me llevo a la habitación entre sus brazos fuertes, me acostó con suavidad y me besó de manera tierna, transmitiendo todo lo que sentía en ese momento, tristeza, amor, añoranza, enojo.
Todo lo dejo salir en ese beso.

- Como puede ser tan cruel, una persona tan llena de luz y de vida.

Lo abracé, no quiera verlo a los ojos me dolía el tan solo verlo de esa forma.

- En verdad lo siento.

Fue lo único que salió de mis labios, el miedo a que se perderlo me invadió, pero ya estaba hecho, mi partida era inminente.

- No es tu culpa, es la mía, por haberte hecho daño, el cual no te merecías.

Sonreí mientras me acurrucaba en su pecho.

- Quiero estar conmigo hasta el fin.

El acaricio mi cabello y de paso mi cara.

- Estaremos juntos los dos hasta el fin.

Me acosté y el se acostó a mi lado, beso mi frente, después mis mejillas y al final mis labios, una lágrima se deslizó por mi mejilla, al igual que una de el, jamás lo había visto de esa forma, siempre lo ví serio o sonriendo aunque fuese falsamente.

- Lo pones más difícil para mí Asami.

El nego, y recargo su cabeza en mi pecho.

- No lo quiero hacer.

Acaricié su cabello, sabía que era hora de la gran despedida.

- Se acerca el final de nuestra historia mi gran amor.

- No quiero.

Repitió varias veces lo mismo, entonces mis lágrimas no pararon.

- Lo siento mucho amor.

El levanto la cabeza y me vio directo a los ojos.

- Prométeme que nos veremos en nuestra siguiente vida y lo haremos mejor.

- Claro amor, te estaré esperando aquí y allá, en todos lados, mi eterno amor.

Poco a poco mis ojos empezaron a pesar, el sueño mi sueño largo empezaba, mis ojos no se despegaban de los triste ojos negros como la noche eterna.

Cómo pude lleve mi mano a su mejilla y le dije.

- Este el nuestro último adiós ahora, te esperaré, siempre.

Mis ojos se cerraron para no abrirse la mañana siguiente.

~Asami~

Se había ido la persona más importante para mí, entre mis brazos, junto a mi, estaba durmiendo un ángel que al día siguiente no despertaría y todo era mi culpa, por mí se fue dejando a un pequeño ángel y a mi de paso.

Nunca pese que una perdida me dolores tanto al punto de llorar tanto y caer rendido junto a el, te extrañaré siempre mi ángel y amor eterno, nos encontraremos más adelante.

Fin....

😭😭😭 Es para mí difícil, ya que el título jamás fue de acordé para para la historia.
Este final me dió mucha tristeza, sé que no se dan a conocer muchas cosas, pero si quieren que se explique, por favor comenten, lo haré con mucho gusto.
Este es el fin de la historia, hasta ahora a lo mejor se me ocurre hacer otro final, pero mientras eso pasa espero que les allá gustado la historia y que me sigan apoyando en mis futuros proyectos.
Y mil gracias a los que siguieron está historia tan corta.
Una vez mas gracias y una disculpa por la tardanza.

Nos vemos en una próxima historia.

Besos de lejos, cuidense.

Chao.