¿Dónde estás Aria?

La beca

Estoy nerviosa. Anoche me dormí del tirón por todas las emociones vividas, joder, tengo novio... ¡Estoy con Ander! No sé que se supone que debemos hacer ni hacia donde va esto pero estoy muy contenta. Por otro lado, hoy nos dan los resultados de la beca y estoy ansiosa por saberlo.

Hoy he decidido arreglarme algo más de lo normal, me he maquillado incluso. Me he puesto unos vaquero negros acompañados de una blusita blanca de tirantes y las Converse blancas que compré con todos mis ahorros. Me he puesto algo de rubor en las mejillas, máscara de pestañas y un labial transparente brillante. Me siento guapa y feliz, tengo la impresión de que hoy será un buen día.

Ander me ha escrito diciéndome que pasará a buscarme a casa para ir juntos a clase, no puedo evitar que pensará de mi cuando me vea, siempre suelo ir más sencilla y no se si le gustará. Ensimismada en mis pensamientos, no me había dado cuenta de que ya era la hora. Al salir de casa vi a Ander esperándome allí, como lo habíamos acordado, estaba muy guapo, llevaba unos vaqueros con sus Vans de siempre y una camiseta básica negra de manga corta, cuando me vió me miro de arriba a bajo sonriendo y me dió un beso en la mejilla, al acabar me dijo que estaba muy guapa.

Fuimos de la mano al instituto, estaba convencida de que una vez llegásemos me soltaría pero no fue así, pensaba que nadie se daría cuenta pero no hubo nada más lejos de la realidad, al entrar al instituto recibimos varias miradas curiosas, a veces se me olvidaba que Ander era bastante popular, pese a que Camila y yo no lo fuéramos.

Antes de entrar a clase me dio un beso corto y mono en los labios que me dejó aturdida, delante de todos, toda la gente que andaba por el pasillo cerca nuestro nos miró, me sentí algo avergonzada, no estaba acostumbrada a ser el centro de atención, no me gustaba.

Al entrar a clase recordé que hoy nos dirían quienes serían los ganadores de la beca, estaba nerviosa, muy nerviosa. Las clases de la primera parte de la mañana transcurrieron con normalidad. Al salir al recreo, Ander vino hacia mí, me dio un beso como el anterior y me pasó la mano por los hombros. Las miradas seguían ahí, me hacían sentir incómoda pero por otro lado, llamar un poquito la atención tenía su punto. Cami se acercó a nosotros con cara de pocos amigos.

-Podíais haberme esperado tortolitos.

-Tienes razón, lo siento, estoy nerviosa con lo de la beca y salí disparada.

-Querrás decir salimos ¿No? De él no te olvidaste.

Camila tenía razón pero realmente no había sido así, era cierto que en lo primero que había pensado al sonar el timbre del recreo había sido Ander pero también es cierto que fue el quien vino a buscarme, realmente me sentí mal, mamá siempre me había dicho en esos momentos suyos lúcidos sin ir colocada que las amigas siempre iban por delante de los novios y siempre pensé que tenía razón, que no debía de anteponer un chico a ninguna amistad fuese por lo que fuese. Dejé de pensar y volví al mundo real. Camila me seguía mirando, muy seria, de brazos cruzados, esperando respuesta. Sin mediar palabra me abalancé sobre ella, le abracé muy fuerte, con ella me sentía bien, me sentía feliz, era mi hermana, por mucho que no compartiésemos sangre, habitación, madre, ADN... Estábamos muy unidas, la quería muchísimo, le susurré un "lo siento" casi inaudible al que respondió con una cálida mirada y una gran sonrisa, en ese momento supe que todo iba bien.

Cuando Cami y yo nos separamos me dí cuenta de que Ander estaba hablando con Talia, una chica bastante popular, no había hablado mucho con ella ero siempre me pareció simpática, cuando miré en su dirección me miró con una cara bastante exagerada de poco amigos. Me pareció bastante raro dado que no sabía el motivo por el cual me miró de aquella manera y lo dejé correr, quizás había sido imaginación mía. A los pocos minutos vino Ander con Cami y conmigo, me dio otro beso y preguntó: