Cap 1: Las castigadoras

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Hola de nuevo, paso a dejar la historia, como solo hubo dos nominaciones, me decidí por la primera, espero les guste.


Narra Marinette:

Desde pequeña había demostrado actitudes muy amables, serviciales; me gustaba ayudar a la gente, no solo en el sentido moral, si no también hacer cosas por ellos. Ayudaba a mis amigas a cocer sus vestidos o a hornear galletas y pastelillos, todo el mundo siempre decía que tenía la vocación de servir, lo cual es cierto y es lo que ha hecho que esté justo en este lugar.

Actualmente trabajo como asistenta de un grupo, ustedes dirán ¿secretaria?, pues no, soy asistente personal de un grupo musical, llamadas "Las castigadoras", una súper banda de pop rock muy famosa aquí en Paris. Tuve suerte, mucha suerte al ser seleccionada para trabajar con ellas cuando apenas comenzaban su carrera. Ahora son grandes estrellas.

Sus integrantes son Alya Césaire, la líder y guitarrista principal, además de ser una gran amiga, Juleka Couffaine, bajista, Rose Lavillant como vocalista, Alix Kubdel en la batería y Mylène Haprèle, segunda guitarrista y coro. Ellas cinco han llegado muy lejos con su propio talento y esfuerzo, y eso me enorgullece e inspira.

Todo iba de maravilla, vivía con ellas en la misma casa, manteniendo todo en orden para ellas, limpiando, teniendo la comida preparada, quizá me sentía la mamá del grupo, no lo sé, solo sé que era feliz, porque no solo eran mis jefas, si no que con el tiempo, se volvieron mis amigas, y más Alya.

Pero un día...

Alya: ¡¿Marinette?! –me llamó- ¡¡Marinette!! –insistió- ¿Dónde estás, mujer? –me buscaba

Marinette: ¡¡aquí estoy líder!! –grité con voz tenue

Alya: ¿qué? –se cuestionó- pero.. ¿en dónde? No te veo –seguía sin encontrarme

Siguiendo el sonido de mi voz, salió al patio y me encontró, solo que no como ella esperaba..

Alya: pero ¿qué estás haciendo allá arriba? –me pregunto preocupada

Si. Estaba sobre el tejado de la casa, con un martillo en la mano.

Marinette: es que Juleka me dijo que con la última lluvia se filtró agua a su habitación y quise arreglar la gotera –respondí un tanto apenada

Alya: pero ese no es tu trabajo –dijo sobando su frente, justo en la cien- debió llamar al encargado.. –llevó sus manos a sus costados- esta mujer, siempre esforzándose tanto... –pronunció a lo bajo y luego me miro- bueno, ¿podrías bajar por favor?

Marinette: en seguida líder.. –respondí

Una vez bajé del tejado, me reuní con ella.

Marinette: ¿qué sucede? –pregunté con una gran sonrisa- ¿necesitas que haga algo de comer o limpie algo?

Alya: no.. no es eso.. –dijo desviando la mirada- no sé cómo decirte esto.. –continuó sobando su nuca, apenada

Marinette: ¿qué? ¿qué pasa? –pregunté algo inquieta al notar su actitud

Alya: bueno.. –habló- sabes que eres una gran asistente personal y que además de eso eres nuestra amiga pero.. –se puso triste

Marinette: ¡!NO!! –grité- ¡¡Por favor no me corra líder!! –rogué mientras la tomaba por los hombros

Alya: ¿qué? –preguntó confundida

Marinette: trabajare más duro, te lo prometo –seguí, mientras me aferraba a sus hombros- además Rose, Juleka, Alix y Mylène también son mis amigas y yo solo me preocupo por ustedes y.. –me interrumpió

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