2

51 5 23
                                    

Tome asiento frente a mis padres y me prepare para lo que venia, posiblemente me odiaran por lo que estuve a punto de hacer, o decidan hacer que no pasa nada, ignorarlo y seguir adelante

Aunque algo me dice que no harán algo como lo ultimo

- ¿Estas segura cariño? – cuestiona preocupada mama, tomando la mano de mi padre también preocupado

Asiento respirando hondo – Si yo – aprieto mis labios en una fina línea – lo necesito

-De acuerdo, te escuchamos – sonríe leve papa

- Quien me trajo, Gwilym, me salvo la vida básicamente – no alce la mirada, no tenia el valor

- Yo me desperté muy temprano y no podía dormir, recordé que se cumplia un año mas y – cerre los ojos, dios que difícil es esto -  la extraño demasiado

Toma mi mano papa – Nosotros también nena, esta bien extrañarla

- Sali alrededor de las tres a tomar un paseo y… termine en el puente, que esta por la casa de Candace – mama me mira con cautela, parece que sabia a donde iba – me quede ahí un buen rato, llore y grite pero nada me calmaba, y estuve a punto de hacerlo pero – me trabo, comenzando a llorar de nuevo, haciendo a mi madre llorar

Supieron que quería decir, no hubo necesidad de hablar mas, aunque no podía, era imposible que soltara una palabra mas

-Lo siento, lo siento tanto – apretaba a papa

Solo dire, que hubo muchas lagrimas, recuerdos con nudos en la garganta y abrazos largos, sentimentales que no sabia que necesitaba

Fui a dormir, me sentía mejor, la conciencia mas tranquila y agradecida, fue difícil confesar mi intento de suicidio, los ojos rotos de mi mama me quebraron, y estuve por soltar ahí todas mis piezas de no haber sido por papa, que me abrazo tan fuerte como, si quisiera mantenerme unida

Desperté temprano al dia siguiente, alistándome para salir a la escuela, era mi ultimo año antes de pasar a la universidad y estaba muy nerviosa

Como siempre salí en mi bicicleta, y el dia paso sin nada nuevo, algunas miradas lastimosas que algunas personas me lanzaban, el pésame por la perdida de mi hermana y el ‘estamos para ti’, los tantos ‘no estas sola’ que se grabaron en mi cabeza

De regreso a mi casa pase a una floristería y compre unas margaritas amarillas, las preferidas de mama, y el postre favorito de papa. Las sonrisas que me dieron, esa mirada de agradecimiento me indicaron que no fue mala idea

Fue un buen dia, una buena semana. Aprendi a disfrutar de lo cotidiano de mi vida, sin Pamela, y gracias a Gwil

(…)

Luego de eso paso un mes, es miércoles y voy pedaleando de vuelta a casa.

Faltan tres manzanas mas, cuando me detengo abruptamente, estoy distraída y no vi un auto delante de mi

Al frenar y apoyarme en el capo negro veo un rostro asimétrico y bien
conocido en el volante jadear asustado

- ¿Gwilym? – asiente rápido aun dentro del auto

Apenas reacciona para bajar con las llaves colgando de sus dedos – Perdoname, estaba viendo el teléfono – me mira de arriba abajo preocupado - ¿estas bien

-Si, solo el susto – reimos y me relajo posando mis pies sobre el cemento – es bueno verte de nuevo

- También me agrada verte, te ves relajada – me encojo, dando una sonrisa - ¿Cómo te fue con tus padres?

- Fue muy emotivo, pero lo necesitaba, no fue sencillo decirlo y aunque lo ocultaron, se que están decepcionados, solo me cuidan cuando salgo y se preocupan cada que tardo en volver a casa

¥¥ D A D D Y    I S S U E S ¥¥ Gwilym LeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora