Capítulo XVII

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Marinette

Despues de derrotar el akuma, me dí cuenta de hora, llegaría tarde a casa de Luka si no me espabilava, así que fui directa, me destranforme a un par de calles en un callejón, y me acomode la ropa, le dí galletas a Tikki y le pedí que no saliera del bolso. Me daba vergüenza que me viera mi Kwami en esa situación.

Luka me besava y chupaba por todo mi cuello y mis pechos, al igual que sus manos las sentía por todo mi cuerpo, cerré mis ojos y me deje llevar por el momento y sus caricias.
Abrí los ojos cuando abrio mis piernas y él se coloco entre ellas, su miembro se intrujo sin avisar,
- ooh... Mari. - jadeaba en mi oido.
Al rato acabó y se tumbo a mi lado, me beso la sien y me abrazo contra él.
Acabó de nuevo sin mí..
Sí, sin contar que es cosa de dos, de disfrutar ambos, y aquí solo había disfrutado él.
Pestañeé intentando no pensar, me senté en la cama,
- yo mejor me voy ya.- le dije sin apenas mirarlo a la cara, quería vestirme e irme de ahí.
Salí casi a la carrera,
Eres una estúpida, mi conciencia me estaba machacando.
Al llegar a casa salude a mis padres, les dije que estaba cansada y que me no quería cenar, solo ducharme y dormir.
El agua caía sobre mi cabeza, llevándose mis lagrimas, las lágrimas de una tonta que pensó que Luka seguía siendo ese chico simpatico y dulce.
Ya no más...
Tikki me esperaba encima de mi almohada con tristeza,
- Marinette porqué lloras? Te hizo daño Luka? - me preguntó.
- No Tikki, - mientras me ponia mi pijama.
- Marinette no te avergüences, a veces pasa? - con sus intentos de hacer que me sienta mejor.
- No es eso...- me metí en la cama, - solo que me siento usada y vacía. - me sinceré, - creía que a luka le gustaba....pero no lo creo-.
- Mejor no quedes más con él si luego te vas a sentir mal,- me dio de consejo.
- Sé que tienes razón, pero no encuentro a nadie que me guste, puse a Adrien en un pedestal muy alto. - me rei por lo dicho.

Tikki y yo no vovimos a hablar de Luka, ni de amores.
La semana paso sin pena ni gloria, trabajando y mis clases de defensa. Alya me había comentado de quedar el sabado, que llegaría el viernes y tenia muchad ganas de verme y explicarme. Y en verdad era al revés, Alya quería que le explicara los atentados por akumas que no había podido documentar en su blog.

Llegó el sabado habíamos quedado en vernos, fue una tarde estupenda, me reí muchísimo con sus chistes y las trastadas de sus hermanas. Pero su faceta de chismosa salió a relucir,
- Y has vuelto a quedar con Luka? - lo dijo y me ahogo con mi saliva.
- Sii... - fue un susurro y mire mis manos en mi regazo.
- Y que tal? - sus ojos se abrían de curiosidad.
- No estoy segura Alya, no me siento cómoda hablando del tema, - respondí. - Tú y Nino....ya sabes? Los dos llegáis...? - pregunte con vergüenza.
Alya despues de burlarse de mi un rato me explicó
que las primeras veces todo fue un poco invenstigar lo que les daba más placer y que algunas veces no llegaba porque eran novatos, pero con el tiempo los dos disfrutaban mucho.
Cuando llegó mi hora de dormir pregunté a Tikki si sus otras portadoras habían tenido problemas de este estilo.
La pobre kwami pensó antes de contestar, con carita de pena me comento que no, que las otras portadoras al ser de tiempos antiguos las mujeres jóvenes eran cortejadas por sus futuros maridos.

A media semana Alya me llamó y después de hablar de mil cosas, ne convenció para quedar, al final acepté, pero después de mi clase de defensa, le comenté que una de las chicas trabajaba cerca en una cafetería muy bonita y que podríamos.

Las tardes que tocaba defensa personal se me hacian amenas, todas las chicas no llevabamos bien, segun mejoraban nuestros golpes nos mostraban algo de boxeo. Ese tarde empezó con risas y piques entre dos de ellas, eran las más veteranas y acabaron en el ring. Así que el profesor permitió hacer la clase en el ring. Habíamos practicado golpes y patadas, me tocó el turno, estaba algo nerviosa, no era mi idea de luchar con nadie, si me salia la vena luchadora a lo Ladybug podría ponerme en un aprieto. Mi rival era Claire,
- No te preocupes, lo haras bien- me dijo con una gran sonrisa.
- Esta bien, no seas muy bruta, por favor, - pedí, entrando en el ring y colocandome los guantes.
Las demás nos miraban, era algo nuevo, y la curiosidad de como nos movíamos en ese ámbito hizo que incluso varios chicos que entrenaban nos miraban como si de un espectaculo fuera.
Me puse en posicion con los brazos por debajo de mi barbilla, mis piernas se flexionaron, oí el aviso de empezar, Claire me atacó sin avisar, lanzo su puño derecho hacia mí, impacto contra mi brazo, pude esquivar pero el siguiente golpe me dío en el estómago.
Me quedé sin aire por un momento,
- vamos Marinette, sé qué puedes hacerlo mejor- me incitó.
Respiré y ataque, y esta vez no fue Marinette, fue Ladybug.

Mas Que Amigos. MLB, 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora