Mi Cita Soñada

Extra: Embarazado?

¿Soñar? Siempre soñé con casarme con el hombre que amo, el hombre que conocí desde que estábamos en pañales, el que se fue convirtiendo en mi mejor amigo, mi amor secreto, mi amor imposible, amor no correspondido, unilateral, amor sin futuro y por último cuando mi esperanza se estaba esfumado me declaro su amor y me pidió una cita.

Desde ese día nos convertimos en amantes, socios, cómplices, amigos, prometidos y esposo.

Despierto con él todos los días y lo primero que miro es mi hermoso rostro, sus suave y delicados labios que son tan apetecibles, sus largas pestañas, mejillas suaves, rostro hermoso, el hombre perfecto está a mi lado y soy el más afortunado por ese motivo.

- Por qué me sigues viendo? ¿Estoy tan guapo? - Su voz sonó adormitado y me sonrió con sus ojos cerrados. Bese su nariz, luego sus párpados y frente.

- Eres simplemente perfecto - Bese suavemente sus labios mientras el despertaba de su sueño. - Te amo Tee- El rio y me abrazo por el cuello. Se sentó en mi regazo de una forma que mi pene que estaba desnudo jugará con su agujero.

- Yo te amo más- Tee me beso suavemente y siguió moviendo sus caderas provocando que mi pene se despertara - Terminaremos con esto - Tee agarró mi pene y lo colocó en su entrada lo introdujo poco a poco y Vaya a que entró todo.

- Creo que aún está estirado de lo que hicimos anoche - Tee empezó a mover sus caderas y yo empecé a besar su pecho y jugar con sus pechos besaba, chupada y mordía los pezones de mi hermosísimo esposo. - Tae, te amo - Tee susurró en mi oído y siguió moviéndose.
(Continuaremos después 🙁🙁🙁)

A la hora del almuerzo bajamos a comer al restaurante del hotel, nos sirvieron unos deliciosos camarones y calamar a la plancha.

- Amado esposo, quiero calamar - Tee hizo un hermoso puchero cuando su plato estaba vacío y su comida ya había desaparecido en su estómago.

- Sí, señor esposo. Si continúas comiendo así creeré que estas embarazado y pronto seremos padres - sonreí ante la loca idea de pensar que mi Tee estaba embarazado, es imposible él es un hombre.

- No, no estoy embarazado, pero desde que llegamos a esta isla hace tres días no hemos parado de tener sexo. Lo hacemos al despertar, después del desayuno, antes del almuerzo, después del almuerzo, por la tarde, antes de la cena, después de la cena, antes de irnos a dormir. Bueno, técnicamente hacemos el amor todo el día y a cada rato, querido esposo - Tee me miro con su hermosa sonrisa. Y tiene razón hemos estado haciendo el amor desde que llegamos aquí y no hemos parado.

- Si fuera una mujer ya estuviera embarazada de al menos unos cinco niños - Dijo mientras comía un pedazo de pastel de coco, con este ya son más de Seis que se va comiendo.

- Pero eres mi Tee y no deseo otra cosa además de que seas mi Tee y estés conmigo para siempre. Solos los dos... para siempre…. - le sonreí y él me sonrió de nuevo.  Él se acercó a mí y se sentó en mi regazo, muchos nos observan, pero que importa los demás aquí solo él y yo importamos.

- Eres genial, no imagino a nadie más como mi esposo si no eres tú... te amo - Beso suavemente mis labios y escuché vagamente el ruido que nos rodeaba muchos murmurando sobre nosotros.

- No prestes atención a los demás solo a mi - Tee susurró en mi oído.

- Te amo - Repetí cerca de sus labios. El corto nuestra distancia de menos de un centímetro y beso mis labios suave y dulce. Así son sus besos dulces, suaves, salvajes, hambrientos, de diferentes formas y amo cada forma con la que me besa.

Después del almuerzo salimos a caminar por la playa mientras hablamos juntos bajo el calor acogedor del sol. Nos abrazamos y tomamos de la mano hasta que llegamos a un barco que nos llevaría a conocer más allá de la playa.

- Si tomamos ese barco, ¿Podemos ir a otra isla? - Tee pregunto feliz, este barco no sólo es para conocer el mar hasta al centro, sino que nos lleva a otra isla donde pasaremos el resto de nuestras vacaciones.

- Sí, hay que subir, nos abandonara si no subimos- Lleve a Tee hasta el fondo del barco y nos embarcamos hacia la isla que queda cerca.

Tee tomó fotografías y dormimos un raro mientras llegábamos a nuestro próximo destino. Después de dos horas llegamos a la isla, muchas personas fueron recibidas por sus familiares y nosotros sólo continuamos nuestro camino hasta encontrar la habitación de hotel para hospedarnos.

- Tenemos cuatro días más para pasarlos juntos, Tenemos cuatro días más para intentar quedar embarazados y tener nuestro hijo, y si resulta podemos.... hacer otro en el camino - los dos reímos ante la ocurrencia de mi querido esposo, nos acostamos acurrucado en la cama abrazándonos y riendo de nuestras ocurrencias.