Jure nunca escribirte más
Pero ya vez nena
No se respetar las reglas
Te escribo, melancólico
Con alcohol en la sangre
Y absorbiendo humo tóxico
Mi vida, perdió el sentido de vivir
Y me sigo despertando deprimido
Sigo desvelandome para escuchar los aullidos
Aullidos, de algún animal, que ronde por la calle
No se, por qué aún te hablo
O ¿por qué no te he bloqueado?
O borrado tu contacto
De mi teléfono y quitado tu foto de mi fondo de pantalla
Será que espero que regreses
Que me consueles
No soy el de antes
Estoy en un estado taciturno
Los físicos, buscan conservar a la raza humana
Y yo, sólo pienso en no borrar de mis recuerdo, tu cara
Unos fuman tabaco y marihuana
Y yo fumo las palabras que decían que me amabas
Las inhalo hondo y más trago por un momento
Pero de nuevo, se me escapan frente, a mi mismo
Así, como el humo, de cualquier cigarro
Indagó, en los recuerdos, alguno que no sea amargo
Pero no encuentro ni ninguno
Solo, de tú y él
Acurrucado en mi cama
Sólo acariciando a la almohada
Se que hay esperanza
Pero no parece que vaya a llegar
Se arrastra, muy lento hacia mi y me deja mucho tiempo esperando
Me da miedo salir del cuarto
Temo encontrarte con tu nuevo novio
Y en ese momento
Mi corazón se revuelque, como una babosa a la cual le hechas sal
¡Sal de mi!
¡Maldita sea!
¡Maldita!
¡Maldita tú y él !
Por favor marchate y déjame vivir
Volver a ser el que era antes de conocerte
Alegre y nada dramático
Odio las ansias, que me esclaviza y me obligan a verte
¡Estupido verdugo! que habita en mi mente
¡No puedo contenerme!
Ni contener llantos de dolor
Y lo peor que ya no tengo a mi madre para que me abrace
Como cuando era pequeño y donde todo iba bien, no había rencor
De nuevo me hablas y finjo que voy bien
Así seguiré
Probablemente hasta mi muerte
O sea, cuando jale el gatillo que apunta a mi frente...
