capitúlo 36

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Cuando llegó a mi habitación me libero del saco y la corbata, todo está muy silencioso, normalmente karol escucha música o los ladridos de Sam persiguiendo alguna polilla inundan el lugar pero todo está demasiado silencioso.

Me doy un baño rapido y me pongo ropa comoda, salgo de mi estancia con intenciones de ir a la cocina pero la puerta de karol está entre abierta, está acostada en la cama con los auriculares y Sam está hechado en su vientre. Cuando persibe mi presencia da un respingo y se quita los auriculares.

-me asustaste.

- Si, ya me di cuenta.

- ¿qué haces Espiando en la puerta?

- No espiaba.

- si lo hacías.

- ¿ya comiste? - ella niega con la cabeza - voy a pedir hamburguesas, ¿quieres?

- ¿tu vas a comer hamburguesas? Señor desayunos saludables -levanta una ceja-

- supongo que si, eso are.

Hay cierta tensión entre ambos, no puedo creer que se allá puesto así de nerviosa por un beso, el beso.

-pideme una con papas, por favor.

Asiento levemente y me dirijo a la cocina por un vaso de agua mientras marco el número del establecimiento y ordeno lo que quiero.

Aproximadamente unos 40 minutos después sube un empleado de seguridad con una bolsa en la mano.

- Sr. Pasquarelli, a llegado su pedido.

Dejó a un lado el control del televisor y sacó mi billetera, le doy unos billetes.

- le dices que el cambio lo tome de propina, por favor.

- como diga. -deja la bolsa frente a mi y se va por donde vino-

- ¡karol! -grito- ¡la comida llegó!

- ¡voy! -escucho desde el piso de arriba y voy a la cocina por un par de platos, en cada uno pongo una hamburguesa con su respectiva porción de papas y sirvo dos vasos de jugo de arándano, los pongo sobre la barra de la cocina, no pienso llevar esto al comedor, sólo somos dos.

Escucho los pasos de karol a mis espaldas y detrás de ella los jadeos de Sam al bajar las escaleras, aunque ya creció un poco le sigue costando bajar y no se diga subir, el pobre animal descansa cada cinco escalones cuando sube.

- gracias - dice karol tomando su lugar en la barra- hoy llegaste más tarde que de costumbre.

Toma una papa y la lleva a su boca.

- Si, uvo un inconveniente. - le doy un mordisco a mi "comida"- ¿por qué no habías comido? -sus hombros se encojen-

- pues, desayune un batido, después tome ese estúpido té acompañado con galletas y sólo eso - muerde su hamburguesa y mete otra papa a su boca- no me dio más hambre hasta ahora.

- es muy poco para las 7:46 pm. Debes alimentarse bien.

- Si papi. - dice con una sonrisa-

Carajo.

- no me digas así, no estoy jugando al padre ni por asomo, karol.

Ella no dice nada.

- ¿por qué huiste despues de ese beso?, karol. -doy un trago a mi jugo y la miro, ella traga el bocado que tiene en la boca y toma otra papa entre sus dedos jugueteando con ella-

indomable -ruggarol- [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora