capitulo 1

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"Pip pip pip" el aclamado despertador sonó, dejandome saber que un nuevo día había dado inicio y por lo cual tenía que dejar mi cómoda cama. Hoy era lunes y el comienzo de semana siempre solía ser pesado más aun para una estudiante en su último año de insituto con el futuro de su vida en sus manos, y no era para menos, a duras penas opte por levantarme porque de otro modo hubiese seguido durmiendo y perder el primer día clases no estaba en mis planes.

De pie frente al espejo hice una mueca de asco al ver mi rostro palido y ojeroso, con bastante pereza prepare las cosas para ducharme, la escencia a flores comenzó a sentirse en todo el cuarto de baño, envuelta en mi bata de baño blanca, comencé a alistarme para irme al instituto, porque por más que detestára estar en aquel sitio, debía de estudiar para poder el día de mañana ser tan famosa como mi bella, encantadora y millonaria tía.

Era posiblemente la persona que más admiraba en este mundo, tenía todo lo que una persona solo soñaría, fama  una cuenta de banco con muchos digitos, no obstante carecía de tanta humildad y bondad. Ella no llego allí con ayuda, lo hizo sola, con sus esfuerzos, inteligencia y determinación, probablemente la mujer más bella y fuerte que pueda llegar a existir.

—Hola tía— la saludé dejando un casto beso en su mejilla, sonrió en respuesta.

—Hola cariño, siéntate preparé tortitas— comentó con tono maternal, cargando tanta ternura y adoración en sus palabras.

La verdad de todo esto era más simple de lo que parecía. Amaba a mi tía como si fuera mi madre, la tomaba como una y ella se encargaba de aconsejarme como solo una madre debe de hacer. Ustedes se preguntaran ¿Donde esta tu madre? Y no, no ha pasado nada trágico, no a muerto, ni me ah abandonado, o bueno por lo menos no por completo, ella solo trabaja y viaja por el mundo con mi padre, solo los veo en acción de gracias o alguna otra fiesta festiva, que para mi desgracia no hacen más que criticar.

Desde entonces mi tía se a encargado de cuidarme, aconsejarme y también regañarme cuando es debido.

—Gracias tía— le sonreí, ella me la devolvió tiernamente la sonrisa y se sentó en su sitio, justo en frente de mi.

Me encontraba terminando de desayunar, mientras hablaba con mi tía de la nueva edición de verano que se lanzaría en unos meses, cuando mi celular vibró a la llegada del mensaje de mi mejor amigo, avisándome que estaba afuera esperando por mi, porque si, él era mi chofer personal.

Pedí permiso para levantarme de la mesa, para ir a buscar mis cosas, dandome una última mirada al espejo y diciéndome mentalmente que me veía radiante, mientras me veía en el espejo, dandome animos a mi misma y creyendo en mi como siempre debía de ser.

—Nos vemos en la noche, tía— la saludé, dejando un beso en su mejilla.

—Bueno, cariño, trata de no meterte en problemas ¿Si?.

—Eso no te lo puedo asegurar— respondí con una sonrisa encantadora, a la vez que ella rodaba los ojos y negaba con diversión, estire mi brazo y lo moví en el aire despidiendome de ella con una sonrisa.

—¡Hola, Darling!— lo saludé con un beso en la mejilla, al entrar al rojo, llamativo y costoso auto de mi mejor amigo.

—Hola, princesa— me saludó con un beso en la mejilla, para luego poner en marcha el auto, en dirección al instituto.

Al llegar, para mi mayor desgracia, nos encontramos con Noah, era un chico con una muy buena contextura fisica, es decir, era alto, morocho y con una sonrisa encantadora, pero eso era lo único buena que tenía, para su mala suerte creo que el espermatozoide que lo progenitó venía fallado y termino por ser un imbécil sin cerebro, así que por más bueno que estuviese no arreglaba lo idiota que era, por lo tanto no estaba en la lista de personas agradables para mi.

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⏰ Última actualización: Oct 12, 2022 ⏰

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