La familia perfecta

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¿Y si tus mayores pesadillas se vuelven realidad?

Titulo original: Una Familia Perfecta.
Autora: Maru Ramírez.
Año: 2020.
Corrección y edición: Day Bustos.

Llego al patio trasero de mi casa, algunas luces aún están encendidas.
Hoy trabaje un turno extra en el cine y olvide decírselo a mi padre, espero que
Ana ayudara a mi padre con la cena o si no todos se han quedado con hambre,
aprecio mucho el esfuerzo que pone mi padre pero definitivamente la cocina no es lo suyo.

Camino lentamente antes de entrar en casa, todo es tan raro desde que mamá
murió, hace sólo tres meses mi vida era tan distinta, entraría a casa y mi cena
estaría sobre la mesa, Ana, mi hermana la que sigue de mi, estaría hablando en
el teléfono o bailando en su habitación. Loli, que tiene siete años estaría en la
cama de mi mamá esperando a que la llevarán a dormir después de alimentar a Ross, mi pequeña Ross, con sólo cuatro meses es la que más sigue sufre por la muerte de mi madre. Tal vez porque soy la mayor, o porque mi madre se fue, pero ahora ella es lo más importante en mi vida, mi tía Laura fue muy buena cuándo nuestra madre nos dejo, ella vino y no ayudó en todo lo que pudo, incluso se ofreció a llevarse a Ross con ella pero no podíamos aceptarlo, perder a mamá fue difícil pero perder a nuestra hermanita era impensable, no habríamos soportado más.

Abro la puerta sin hacer ruido por si Ross ya está dormida, apenas doy tres
pasos cuándo noto algo extraño, la mesa de la cocina aún tiene la comida comida intacta, varios cajones están abiertos y hay algo pegajoso tirado en el piso. Dejo mi bolso en la mesa y me quieto el suéter antes de subir.

Siento a mi corazón saltar pero guardo la calma, no pasa nada, esto tiene una
explicación. Me obligó a caminar lentamente cuando llegó a la escalera noto
que mis manos están temblando pero lo ignoro y subo.

Me detengo frente a la primer puerta, es la de Ana, que esta entre abierta. Doy
un pequeño toque y esta se abre lentamente, doy un par de pasos notando que es
la primera vez que esta habitación esta en absoluto silencio, entonces veo una
enorme mancha de sangre. Me tapo la boca para evitar gritar, las lágrimas inundan mis ojos, la habitación esta vacía. Vuelvo sobre mis pasos y me dirijo a la habitación de Loli pero antes de entrar me detengo frente a mi propia habitación al notar que en esta también hay sangre, sólo son unas manchas pequeñas pero un frío helado me recorre la espira dorsal.
Ahora estoy temblando más. ¿Qué rayos paso aquí?, no pienses Kenya, me ñdigo a mi misma, si lo haces entrarás en pánico.
Mi habitación esta a oscuras y creo que me volveré loca al encender las luces y
ver a Ana tendida en el piso, con un cuchillo clavado en la espalda. Muerta.

En un segundo ya estoy afuera, limpiando mis ojos con la manga de mi blusa,
¿dónde está mi papá? ¿a caso algún loco psicópata entró en casa y lastimó a
toda mi familia? No, no, no, esto no está pasando, no estamos en una maldita
película Hollywoodense. Pienso en ir a buscar a mi pequeña Ross pero algo en
la puerta del baño me llama la atención, la luz de allí esta encendida, tal vez Loli está dentro, tal vez esta asustada y se escondió allí. Entonces veo la peor cosa que podría imaginarme, la bañera esta llena, al meter mis manos aún la siento tibia, el piso esta ligeramente húmedo y Ross, mi pequeña, la persona a la que le prometí que jamás la dejaría esta en el fondo del agua. La han
ahogado.

La saco con cuidado del agua y me abrazo a su cuerpo, esta vez ya no me
importa si alguien me oye, ya no me importa nada. – Ross...– hablo entre llantos
– Ross lo siento tanto.

Después de un rato, me levanto con ella, no se a donde ponerla pero debo ir por Loli, necesito encontrarla, porque alguien debe estar vivo, al menos alguien debió alcanzar a huir, ninguna persona entra a un casa cualquiera y termina con una familia completa, ¿verdad? ¿qué clase de monstruo haría algo así, y por quéa nosotros? ¿acaso no hemos sufrido ya bastante?

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