¡MIERDA!Fue la primera palabra en formular en el día, una mañana bastante inusual, puesto que jamás se despertaba con pesadillas de ese tipo, ni mucho menos con aquellas como esas, ver al peli naranja de la noche anterior morir no era para nada lindo, ni la mejor forma de despertar un día sábado por la mañana.
01:27.
O de la tarde.
-¿Enserio ya es medio día? ¿Enserio dormí tanto?
Paso su mano com frustración sobre su rostro y se levantó rápidamente, para tomar una corta ducha y vestirse rápidamente, casi a la velocidad de la luz. Había olvidado por completo su salida con su amigo y no lo haría esperar como la última vez.
Se dirigió rápidamente a la cocina, tomando su mochila y sus llaves, sin siquiera comer algo, nada más corrió a la parada de taxis y se dirigió al centro nuevamente.
- Media hora tarde sucio.- Habló un delgado chico, sentado en una de las bancas del parque, abrigado hasta las orejas, con su nariz rojisima por el frío.
- Lo siento cachorro, me quedé dormido, ¿Esperaste mucho?.- Preguntón acariciando su mejilla, aún con sus preciados guantes azules puestos.- Ah, que estoy diciendo acabas de decirme media hora, lo siento, estoy en las nubes.
- Si como sea, mejor vamos, necesitamos pasar por algunas tiendas que cierran temprano hoy, además tengo mucha hambre y por demorar pagarás mi comida.- Hyunjin solo asintió con la cabeza a todo lo que su amigo le decía, mientras caminaban en dirección a las tiendas que Seungmin nombraba.
- - -
- Entonces pinte todo su abrigo con pintura para tela, así no volvía a salir y pagaba por todo lo que me hizo.- Ambos se encontraban en una cafetería, llenos de bolsas y cajas de cosas que estuvieron comprando todo el día. Y ahí estaban ahora comiendo y conversando del muy mal ex novio que Seungmin había tenido.
- Que descarado, yo que tú le tiraba sus cosas por la ventana y cambiaba la contraseña del departamento, aunque lo del abrigo fue ingenioso, más por que le gustaba, eres un genio.- Alago Hyunjin, tomando un sorbo de su café cargado, con bastante azúcar.
- Lo sé, lo sé, soy un genio y el un ex con sed de venganza, se que tratará de hacer algo, lo conozco bien, se vengara de mi.- El chico río y le dió su último mordisco a el pedacito de media luna con chocolate que le quedaba. Miró la hora en su teléfono y abrió sus ojos con sorpresa.
- Hyung, ya es tarde, debo ir a casa ¿Me acompañas a la estación?.- Pregunto el menor de ambos, tomando sus cosas y dejando propina para el mesero.
- Está bien, te acompaño, además, tengo más cosas que hacer en el centro, así es que no volveré a casa tan tenemos.- Respondió ayudando al menor con sus bolsas, mientras salían de lugar.
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"The color of happiness"
Short Story"El color de la felicidad" Sin metáforas, bastante.