Capitulo 11/ Primera Cita

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Aaron se encontraba encorvado con sus brazos en el punto donde le había golpeado, le había tomado de sorpresa el golpe, el cual había sido sin querer.

-¿Te encuentras mejor?- Habían pasado ya minutos en los que él se había quedado en esa posición y no se había movido en ningún momento.

-Sí - Dijo levemente bajo mientras se enderezaba con su mano derecha en su vientre- ¿Cómo que Taylor te obligó a almorzar con él? - Hizo una mueca de dolor.

-Ah, si...- Me rasque la parte trasera de mi oreja- Lo que paso fue que me mandó una nota preguntándome que si almorzábamos juntos y le di a entender que no, pero aun así se apareció al final de mi clase de arte, así que no tuve alguna otra opción que almorzar con él.

>>No sé qué es lo que trama, pero estoy segura de que trama algo, por que es raro que se siga insinuando después de que días atrás me miraba con odio- Me quejé mientras caminaba de un lado para el otro, al final miré a Aaron, quien estaba parado poniendo todo su peso en una pierna y cruzado de brazos pensativo.

-Quizá en su momento te odiaba, pero sus ganas de meterse en tu cama son más fuertes que su odio por ti- Bromeó con algo de amargura mientras descruzaba sus brazos y los dejaba caer.

Me reí negando, me daba risa el hecho de su molestia hacia el tema de Taylor, sabía que no le agradaba para nada y que dentro, pero muy dentro de él, llegaba a sentir un pequeño odio hacía Taylor, aún que él decía que no lo odiaba a pesar de todo lo que le hizo sufrir.

-Sí, supongo que es éso- Intenté hacérmelo creer- Bueno, continuemos con el entrenamiento- Aaron asintió.

Nos pusimos en posición de combate y Aaron dio el primer golpe, llegué a esquivarlo y lance un golpe a su rostro, Aaron aprovecho para tomar mi muñeca y lanzarme otro golpe que terminé parándolo, con mi brazo libre y mi peso traté de soltarme del agarre de Aaron, lo cual funcionó.

(...)

Pasaron unas cuantas horas de entrenamiento, había decidido tomar un pequeño descanso para beber agua y nos encontramos en silencio, el cual no era incomodo pero tampoco era cómodo, estaba mirándolo mientras bebía agua, se encontraba con su cabello pegado a su piel por el sudor y algo rojo del rostro, su respiración era algo agitada pero se iba calmando al pasar el tiempo.

Mi padre tenía razón, Aaron estaba mejorando con la velocidad en la que regresaba los golpes, pero no los daba aún con la fuerza suficiente, su agilidad para esquivar los golpes también había mejorado, ahora sólo recibía pocos cuando anteriormente recibía la mayoría, y si seguía así dentro de poco se volverá igual o mejor que yo y eso me llegaba a hacer sentir orgullosa de él, se estaba esforzando mucho.

-Elizabeth- Su voz me sacó de mis pensamientos conectándome al mundo real, en donde él se encontraba mirándome con esos ojos grisáceos algo nerviosos.

-¿Si? -

-Ehhh, quería pedirte permiso para terminar el entrenamiento un poco más temprano de lo habitual- Comentó jugueteando con su botella de agua con sus manos.

-Eh claro, ¿para qué? - Pregunté confundida, era la primera vez que Aaron pedía terminar el entrenamiento antes. De repente recordé que la cita era terminando el entrenamiento- ¿y la cita? Se supone que es terminando el entrenamiento-

-Lo sé, lo sé, creeme que no se me olvida éso- Se río nervioso- la cita aun sigue en pié, solo que tengo que hacer algo antes, no me tardaré más de una hora, será rápido... O eso creó- Me sonrió e hice lo mismo.

Mi Mate Es El NerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora