Misión

12 0 0
                                    

Desde la primera imagen que te envié, supe que eras mi siguiente misión. Tenía ya un tiempo ayudándome a mi misma a salir de un hueco, donde caí profundo, donde me costó salir pero pude hacerlo, si yo pude, tú también ibas a poder.

De una u otra manera Dios te mandó a mi vida cuando necesitaba a alguien. No me importaba si no podía verte, con tu existencia me bastaba.

Sabía que debía ayudarte aunque no me lo hicieras saber, yo necesitaba a alguien como tú en mi vida.

Cómo tenía ya un poco más de tiempo me propuse metas y objetivos contigo, conocerte y saber más de ti y tu extraño pero interesante mundo, me llamaba mucho la atención esa parte de ti.

Tenías esa extraña manera de hacer todo interesante, sin ser tan expresiva, directa y seca pero con lo poco que expresabas, lo decías todo, era suficiente para mi.

Al principio no sabía cómo hacer que me hablaras más, que me contaras cosas como tu familia o tu pasado, tu entorno, aunque no te veías de ser más sociable que yo, lo veía tan misterioso de tu parte, sin embargo tampoco era alguien de estar pregunta y pregunta a las personas, quería que tengas la suficiente confianza cómo para hablarme más de ti.

Me las ingeniaba para eso, hacerte saber a diario lo valiosa que eres en este mundo.

Bienvenida A Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora