Capítulo 8

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Alexander había preparado una cena especial para su aniversario con Yuri, quería que todo fuera perfecto, amaba tanto al rubio que le daba miedo el tan solo saber que lo perdería algún día, por lo que en su inseguridad pensó que sería el momento indicado para pedirle matrimonio, si su novio aceptaba se sentiría más seguro del amor que le tiene, y le daría el valor para  confesarle que no podrían tener hijos biológicos, porque él solo recordar la car de ilusión de su novio al mencionar el tener un bebé le hacía sentir que lo desecharía por otro.

Ya tenía el anillo listo, le había pedido ayuda a su primo y mejor amigo de su novio para elegirlo, su primo había aceptado aunque no lo veía tan feliz por él y eso lo hizo sentir raro, pero no le prestó tanta importancia al comportamiento de Jean seguramente tenía problemas con su novia y el no quiso meterse a indagar sobre su comportamiento extraño, la verdad era que Jean se sentía incomodo por saber sobre el embarazo de Yuri, y en lo mucho que dañaría a su primo al saber la verdad.

Alex llego puntual por Yuri como siempre, ambos se subieron al carro del pelirojo y emprendieron el viaje al restaurante.

-Te ves precioso amor- dijo Alex colocando una mano en el muslo de Yuri mientras conducía.

-Gracias, tu te ves igual de ardiente- le dijo el rubio guiñándole un ojo

-Si me provocas así, no creo que lleguemos a cenar- le dijo con una sonrisa

-No seas cachondo, luego luego te calientas jajaja-

-Como o hacerlo cuando tengo un novio así de comestible-

-Conduce a ese restaurante antes de que me arrepienta Leroy-

-Por supuesto su majestad-

Ambos mostraban una sonrisa aunque por detrás de esa cara tuvieras demasiados pensamientos negativos sobre como su relación, los dos pensaban que el otro lo dejaría, si se enteraba de su secreto.

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Llegaron al restaurante un tanto elegante, Alex les menciono sobre su reservación y los pasaron a su mesa, el rubio estaba contento ese era su restaurante favorito, tenía una vista preciosa a la torre Eiffel.

-Les ofrezco algo de tomar- dijo el mesero llegando y entregando a su vez la carta

-Podrías traernos una botella de champan- le dijo Alexander

Yuri solo sonrió asintiendo después de todo estaban celebrando, su aniversario, el mesero le trajo la botella y unas copas y ambos ordenaron su cena.

La cena transcurrió con normalidad ambos ya se sentían más relajados gracias al alcohol, pudieron hablar con tranquilidad sin ese nerviosismo enzima de saber que estaban haciendo algo mal, entre risas terminaron de cenar y al momento que trajeron el postre Alex hizo lo ultimo que Yuri esperaba esa noche

Alexander se paro y se arrodillo a su lado, Yuri ya veía venir de que todo eso y se quedo paralizado ni siquiera escuchaba sabia lo que le iba a desir no sabia que hacer si le decía que si y luego confesaba la verdad sobre su embarazo lastimaría mucho a su novio, pr si le decía que no también, el no quería que lo dejara, o al menos eso pensaba el estaba muy acostumbrado a Alex tenían una rutina marcada y el solo pensar que esta iba a desaparecer le daba pánico.

-........Quieres casarte con migo Yuri Plisetsky?- fue lo único que entendió el rubio del discurso de Alexander

Sus ojos se llenaron de lagrimas pero no de felicidad como lo parecía si alguien lo veía era desesperación por no saber qué hacer

Asi que solo asintió y lo abrazo eso fue un alivio para el pelirrojo aparto un poco a Yuri y le puso el hermoso anillo de compromiso que había comprado, se besaron y todos a su alrededor aplaudieron, uno suspiro de alivio por pensar que no aceptaría y el otro solo podía pensar si eso que estaba haciendo era lo correcto, aunque los dos estuvieran equivocados.

Hecho en las vegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora