¡Hermanos jamás! (Kellic Quentes)

Capítulo final

Capítulo final: Aún significa algo.
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Llegamos a casa y subimos corriendo las escaleras. Ambos entramos a mi cuarto.

Rápidamente me deshice del estúpido pingüino de bodas con ayuda de Vic, y una vez tenía sólo la playera... Mis labios se encontraron con los de Vic después de tanto tiempo. Es increíble lo que él logra en mí. Ni siquiera yo sabía que podía amar de esta manera.

¿Conocen ese lugar entre el sueño y el despertar, el lugar donde aún puedes recordar los sueños? Ahí es donde siempre lo amaré, porque ahí es donde siempre lo estaré esperando.

-Pensé que me odiabas -Dijo él cuando nos separamos, ambos teníamos las frentes unidas, escuchando la agitada respiración del otro.

-¿A quién quiero engañar? -Le respondí- Todavía me dueles, maldita sea. Todavía me importas -Confesé, él tomó mis mejillas con ambas manos sin separarnos- Por eso disfracé todo el amor de odio, de indiferencia, así me distraiga con otras cosas, tú todavía tienes todo de mí, todavía tienes todo mi corazón -Agregué- ¿Acaso esto no va a terminar nunca? -Concluí, él me besó incluso con más fuerza que el primer beso.

-Te prometo que no dejaré que eso pase -Añadió mientras sus ojos se encontraron con los míos- Te prometo que nadie volverá a meterse en lo nuestro.

(...)

Ya habíamos charlado lo suficiente, ahora faltaba escapar juntos. Saqué una maleta de mi armario. Me puse una playera, un jean, mis calcetas y tenis... Y regresé a mirar a Vic. Él ya estaba cerrando la maleta con ropa de ambos. Tomó una mochila que tenía yo al lado de mi cama y metió pares de tenis.

Yo sonreí y por otro lado tomé una carpeta y comencé a meter mis papeles universitarios. Corrí al cuarto de Victor y repetí la acción.

Tomé la mochila de Vic y mis pasos rápidos de nuevo fueron a mi cuarto. Ahí metí los libros que habíamos leído juntos y una foto de Ángela y yo. También metí el álbum que tenía con Vic y corrí nuevamente al cuarto de él para meter la única foto que tenía en su mesa de noche.

Tomé una sudadera de él y me devolví al cuarto. Se la di y él se la puso enseguida. Yo tomé también una del armario y cuando hacia eso, escuchamos el carro estacionarse.

Vic y yo nos regresamos a mirar de inmediato y sonreímos. Cada quién se colgó una mochila.

-¡FUENTES Y QUINN, MÁS LES VALE QUE NO ESTÉN AQUÍ! -Escuchamos a mi madre gritar eufórica mientras claramente subía por el segundo piso.

Yo me acerqué a la puerta silenciosamente y la cerré. Vic tomó la maleta y ambos nos dirigimos a la ventana. Ambos salimos dando con el techo. Vic tiró ambas maletas al suelo las cuales cayeron intactas. Luego, saltó al árbol enfrente de él. En cambio, yo bajé por las enredaderas del poste de luz.

Y al estar en tierra firme de nuevo, Vic tomó la maleta con una mano y con la otra tomó mi mano, comenzando a correr juntos tan rápido como nuestros pies nos lo permitieran.

Toda mi vida construí esta armadura, y cada disfraz que he usado, con las cenizas y el polvo fabriqué una isla...

Ahora, de cara al final, me pregunto «¿Para qué?»

Algunas veces es solo una batalla, y otras una guerra. Ahora me dí cuenta que, nunca estuve solo estando con Vic.

Lidiar con que fuimos "Hermanos" tal vez fue la batalla más grande que tuvimos como pareja. Y aunque algunas veces creímos perder la fuerza... Nunca estuvimos indefensos.

Después que nuestro tiempo haya pasado, seremos como la luz a través del vitral y nosotros seguiremos adelante, seguiremos y seguiremos. Y al final nunca nos habremos ido. Porque nuestro amor es más grande que cualquier barrera. Porque si tuviera que elegir, volvería a escogerlo a él por sobre todas las cosas.

Voy a vivir en el amor y la muerte.

Voy a vivir toda mi vida al lado él.

-Te dije que conseguiríamos esto -Dijo Vic una vez nos habíamos alejado lo suficiente, yo chillé emocionado, lanzándome a sus brazos.

-Sí, sabía que lo conseguiríamos -Respondí y ambos nos fundimos en un beso que duraría por toda la eternidad.

¿Qué tiene de malo querer ser feliz?

Seré suyo para confiar que esto no es lo último de nosotros.

He dicho.

Fin.