▪:○.'•°[no somos tan diferentes]°•'.○:▪

❤️8❤️

Pudo ver a lo lejos las islas donde se había asentado su pueblo y el, sus alas dolían por un trayecto tan largo pero ignoraba eso. Apenas pudo aterrizar se dejó caer llevándose consigo algunos árboles y chocando con una cabaña en construcción.

Todo estaba borroso por el golpe, podía escuchar a la distancia la voz de sus amigos confundidos y alterados, soltó un  gruñido cuando pudo oler la fragancia de Hipo he intento moverse pero solo logro gruñir de dolor.

Todo se puso oscuro y lo único que podía hacer a pesar de la desesperación que traía consigo era dejarse caer en la oscuridad misma.

...

Otro dragón más.

Estaba oculta entre unos cristales junto a otros dragones, el silencio inundaba el lugar. Recuerdo cuando el primero fue capturado, algunos reaccionaron violentamente para pelear pero fue inútil.

Eran demasiados cazadores y lo más sensato fue buscar un escondite. Justo a mi habían por lo menos 6 dragones, decidí asomarme y noté por el rabillo de mi ojo como 3 cazadores se acercaban rápidamente hacia nosotros.

Solo quedaba pelear para no ser atrapados tan rápido, me prepare y le hice señas el resto para que también lo hicieran.

Separados somos débiles, unidos podemos contra todo.- repetí en mi mente mientras mis escamas se erizaban.

Todo desde hay fue muy rápido y confuso.

Dispare una bola de plasma mientras los demás atacaban sin piedad, golpeando, arrojando y lanzando alientos de fuego y ataques a aquellos cazadores. Por lo menos dos de ellos murieron mientras que el resto estaban a punto de estarlo. Pero un grupo de dragones similares a escorpiones se abalanzaron contra nosotros y con unos feroces aguijones perforaron la piel de todos incluyendo la mía.

Todo estaba borroso y oscuro, solo podía escuchar a la lejanía todo y un enorme sueño me invadió...

No te duermas.

No te duermas.

No te duermas.

Repetía una y otra vez pero mis párpados se hicieron más pesados y no pude resistir más...

Que los Dioses tengan piedad de nosotros.