EL INICIO

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Así comienza la historia : 

    Es casi inicio de clases, y claramente los padres siempre se encargan de firmar un relevo de responsabilidad en la escuela. 

    Si se preguntan por la protagonista, me debería de presentar. Mi nombre es Blaze, y no, Blaze no es un nombre de niño. Tengo 14 años de edad. Vine a la esceula en busca de un amigo, su nombre es Otirik, su nombre es súper raro, lo sé. En fin, me dijo que acompañaía a su madre hoy. Si se lo están preguntando, me gusta, pero como muchos más, estoy enterrada en la friendzone. 



Recibo un mensaje de él, al darme la vuelta está a mis espaldas.


-Hola mi niña- me dijo con toda la confianza del mundo

-Hola tarado- le rspondí

- Pero cuanta hostilidad

-¿Quiéres caminar?- cuestioné

-Vamos- dijo mientras empazamos a caminar


Bajamos las escaleras tomados de la mano en silencio, era algo estupida, él siempre me pasaba ilusionando, iba a decirme algo, pero me le adelanté al ver algo fuera de lo normal decendiendo del cielo.


-¿Qué rayos es eso?- dije casi gritando demaciado aturdida comompara pensar con claridad

-P-parece... ¿un tornado? Cuidado, está bajando- gritó mientas me tiraba al suelo


El tornado bajó exactamente donde estabanos, nos rodeaban unas paredes de vientos fuertes, nos encontrabamos justo adentro del tornado. Otirik me abarzó, cerré los ojos, escuché un gran estruendor y al abrir ls ojos me encontraba tirada e el suelo a gran distancia de Otirik, que se encontraba inconciente tirados cerca de un arbusto.

Traté de levantarme, veía todo muy blanco, estaba muy mareada y sentía un dolor de cabeza horrible. Todo a mi alrededor se veía igual, exepto por Otirik que seguía tirado en el suelo. Trataba de acercame a él, pero cada vez lo veía más lejos. En esos momentos sentía como el mundo se iba de lado, poco a poco, hasta caerme. Vi los piés de alguien frente a mi, y allí cerré los ojos.


...


Desperté de un salto, me encontraba en mi habitación, era de noche, sentí una brisa fría que recorria mi nuca. Miré hacia atrás, la ventana estaba abierta. Tomé mi telefono y llamé a Otirik.


-¿Hola?

- ¿Qué paso? ¿Qué recuerdas?

- No mucho, me desperté hace un rato y me puse a buscar por internet, Blaze, no hubo ningún tornado

-Entonces explicame que pasó

-No lo sé, nadie en la escuela vio lo que nosotros vimos

-Entonces...

-Entonces mañana es el prmer día de clases así que sino te impota esperaremos hasta mañana y buscaremos en la biblioteca a ver que encontramos en los libros de psicología

-No estoy loca, yo sé lo que vi

- Pues dime

-Fue un tornado, lo juro

-No hubo ningún tornado, no hubo nada

-Tú lo viste, y saliste herido, ¿Cómo puedes negarlo?

- No creo en los cuentos de hadas, es más probable estar locos, o simplemente nos dió un bajón de azúcar

-No lo creo- le colgué la llamada

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