La chica del dibujo

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—¿Estoy guapo? —Pregunta mi hermano Liam entrando a mi habitación sin llamar a la puerta.

—Buh, Liam feo —contesta mi hermana de tres años, Alba.

—¿Le has quitado esa camisa al abuelo? Es horrible —digo mientras sentada en la cama sigo maquillando a Alba, me sirve de entrenamiento para maquillarme yo más tarde.

Liam mira su camisa azul marina con florecitas pequeñas rojas, es fea, pero a él le queda bien. No es algo que yo le vaya a decir, bastante autoestima tiene ese encima.

—Pues a mí me gusta, me la voy a poner. No es como si la voy a llevar mucho tiempo —abro mi boca asombrada viéndole y él solo me sonríe.

—Liam dame un besho —dice de pronto Alba poniendo morritos hacia él, mi hermano ríe y le da un pequeño besito en los labios y la coge en brazos.

—¿Por qué te pones tan guapa?

—Keisi me ha secuestrado —me acusa en su idioma.

—¡Oye! Eso no ha sido así.

—¿Que le has hecho a mi bebé, Keisi? —pregunta mi hermano mientras abraza a Alba más fuerte haciendo que ella ría.

—No la he secuestrado, ella ha venido y luego no la he dejado salir.

—Y eso es secuestro, Keisi —dice Liam mientras deja a Alba en el suelo—. Eres libre, pequeño canguro.

Alba enseguida corre fuera de mi habitación dando saltos, por algo la llamamos pequeño canguro, está todo el día saltando de un lado a otro.

—¿No sales? —me pregunta mi hermano mientras coloca el cuello de su horrible camisa.

—Carlota está por ahí perdida con Pelayo, y no me apetece salir.

—¿Cómo es eso de que tus dos mejores amigos salgan?

—A veces es genial y otras no tanto.

—Hace mucho que no dibujas —afirma mientras mira su cara en el espejo desde muy cerca.

—Estoy un poco bloqueada —admito mientras me tumbo por completo en mi cama y miro el techo.

—Normal, no sales nunca.

—¿Eso que tiene que ver? —cuestiono mirándole con el ceño fruncido.

—Pues que no te viene inspiración, como sigas así acabarás pintando una carrera de pelusas.

—Me caes mal —le digo haciendo que ría.

Quizás tenga razón y deba ser más social, ¿Pero, tengo la culpa yo de que la gente no me hable? Literal solo tengo dos amigos, ¡Y son pareja! Lo que significa que ellos hacen planes sin contar conmigo y pasan más tiempo juntos, soy una constante sujeta velas.

Bueno, la niña de seis años a la que cuido puede considerar una amiga, ¿No?

Dios mío Keisi Marie, eres penosa.

Lo que ha dicho Liam es cierto, estoy sin inspiración. Es por eso que llevo casi dos semanas, desde el día de mi cumpleaños, sin conectarme a mi cuenta de dibujos llamada drawithKM. No os atrevaís a reíros de mi horrendo nombre. Eran las tres de la mañana cuando lo puse.

—Oye, paso de quedar con María. ¿Vamos al cine? —pregunta de pronto mi hermano mientras está con el teléfono.

—¿Que ha pasado?

—¿Qué, que ha pasado? Que me quiere presentar a sus padres.

—Liam...

—No. Le dije desde el principio que no quería nada serio con ella, estuvo conmigo sabiendo que no íbamos a llegar a nada.

Arruiname la vida - The perfect girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora