Uno

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No es buena idea estar aquí Mateo, tío Víctor nos va regañar

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No es buena idea estar aquí Mateo, tío Víctor nos va regañar. -

No pasa nada Alex tengo todo bajo control. -

Cuatro niños se encontraban en la oficina de Víctor, buscaban algo para que sus padres dejaran de pelar ya que hace unos días los escucharon discutir fuertemente.

Alex tiene razón, si papá nos encuentra aquí nos va castigar.-

Chillo el mas pequeño de los cuatro, estaban comenzando a discutir sobre si tomar algo de ahí o no.

¡Dame eso Gael, eres muy pequeño para esto! -

¡Nooo! ¡Yo no soy pequeño! -

Enojado tiro la botella al piso dejando que una nube grande de humo los cubriera a los cuatro, de un momento a otro se encontraban inconscientes en el suelo de la habitación.

🌿

¡Barca! ¡Deja de molestar! -

¡No mames roberto no te estoy haciendo nada y estas de dramático! -

Ambos adultos estaban discutiendo por cosas sin sentido alguno, sus otros dos amigo solo miraban divertidos a sus amigos.

Okey ya basta, debemos hacer los deberes de la casa. -

Ambos dejaron de discutir para mirarse unos momentos, si las miradas mataran ambos ya estarían en el suelo muertos.

Yo limpio tu oficina Víctor. -

Esta bien Juan, yo limpiare tu desastre que hiciste en tu cuarto ese “secreto". -

Hizo con sus dedos entre comillas, ya que de secreto no tenía nada. Comenzaron a limpiar la casa, barca y roberto separados ya que si lo hacían juntos terminarían en otra discusión más.

¿En donde estamos Mateo? -

Estamos aún en la oficina de tío Víctor, pero esta es su vieja oficina. -

¡Ay no! Estamos en el pasado, donde aún nuestros padres no están juntos. -

Los niños miraban todo con curiosidad la oficina, hasta que escuchan la puerta abrirse dejando ver a un chico que estaba tarareando una canción.

¡Tío Juan! -

El menor de los cuatro corrió hacia el adulto que lo miraba horrorizado y confundido, el pequeño se prendió de su pierna mirándolo alegre.

¡Tonto! Alejate de el. -

Mateo se acerco hasta el, pero el no planeaba soltarse de su tío.

¡C-chicos! ¡Ayuda!. -

Juan grito asustado, ¿quienes eran esos niños? Y ¿por qué le decían tío? Los demás adultos corrieron a su llamado encontrándose con un niño pegado como pulga a la pierna de Juan y otros tres mirándolos.

– ¡Apa dobedto!. -

Ahora Roberto estaba siendo abrazo por la pierna, por el menor de los tres niños. Los otros fueron con el abrazándolo por su pierna.

¡Juan! ¿Quienes son estos niños? Y ¿por qué me dicen apa? -

¡No lo se! Cuando entre estos estaban aquí y me dicen tío. -

Los adultos no sabían que hacer, cuatro niños y cuatro adultos ahora se encontraban el la sala. Víctor hablaba con uno de ellos tratando de averiguar de donde habían venido o salido.

¿Como se llaman? ¿De donde vienen? ¿Quienes son sus padres? ¿Qué hacían en mi oficina? -

Hablo seriamente haciendo chillar a los menores, Roberto se acerco a su amigo dándole un golpe en la cabeza.

Idiota, no les hables así que son solo niños. -

Los pequeños rieron por la acción de su papá, el mayor de ellos miro a Víctor tal y como el lo había echo con ellos.

No nos hables así o papá te va pegar con el bate, yo me llamo Mateo soy el mayor, el es Alex, Gael y Ian.  Nosotros vivimos aquí y nuestros padres son ellos. -

Hablo normal apuntando con su mano a los dos adultos que habían comenzado a discutir, estos pararon mirando horrorizados al niño.

¿Qué somos qué? No, no, no niño eso no puede ser. -

¿Roberto y yo? ¡Ja! Primero muerto antes de meterme con el. -

¿Por qué papá dice eso de apa? -

Gael comenzó a llorar mientras hacia puchero, le dolía que hablara mal de el.

¡N-no llores hedmano! -

Ian abrazo a su hermano por el cuello tratando de tranquilizarlo, Víctor y Juan miraron mal a barca por hacerlo llorar.

No entiendo como ese que apa termino con alguien como tú si lo tratas tan mal. -

Barca sintió un dolor leve en su pecho al escuchar las palabras del niño mayor, ignoro eso mirándolos detalladamente.

Si ustedes dicen ser nuestros hijos ¿como es qué están aquí? -

¡Fue culpa de Mateo! El quería buscar una poción en la oficina de tío Víctor para que tú y papá dejaran de discutir. -

Alex quien por fin hablo miro como sus padres se miraban raro, no comprendían.

Llevemos a estos niños con Akim, el sabrá que hacer tal vez y puedan hacerles una prueba de ADN para confirmar lo que ellos dicen-

Todos miraron a Juan quien estaba de brazos cruzados, el miraba a los niños y tenían parecido tanto como barca y Roberto pero más a Roberto.

¡Bien! Cada uno tome a un niño y en marcha!. -

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