Prólogo

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ATENCION!!!

ESTA NO ES LA HISTORIA COMPLETA, SOLO ES LA PRIMERA PARTE DE ESTA, cuando esté lista subiré la historia completa. Se les agradece por leer :)

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Una madre desamparada, un padre orgulloso y unos hermanos desconcertados. Así se convirtió este momento en el que recibí la carta de reclutamiento.

Cuando la recibí, reuní a toda mí familia en el living - comedor para empezar a leerla. Todos se veían muy atentos al sobre que empezaba a abrir, pero sus caras cambiaron drásticamente a una de espanto cuando interpretaron lo que dije en voz alta. Era un trabajo muy importante y no podía negarme a eso.

Me habían preparado una cabaña en la que me quedaría el resto de mí vida laboral, así que les pedí a mis padres que me ayudarán a empacar para mudarme. Los militares se encontraban afuera esperándome para trasladarme a ese campo.

Cuando estuve listo para partir, mire a mi familia de nuevo, todos estaban soltando lágrimas silenciosas. Los abracé durante un tiempo por última vez para intentar tranquilizarlos, hasta que sonó el claxon del coche en el que me iría. Me despedí de ellos, salí de casa y me subí al vehículo.

El coche empezó a tomar velocidad y se alejó de mí hogar de toda la vida. Miré hacia atrás y volví a ver a mis hermanos menores, queriendo quedarse fuera para despedirse, mientras los uniformados los alzaban para meterlos. Los saludé con la mano respondiendo a su saludo y volví a mí asiento.

Solté unas cuantas lágrimas. Posiblemente no volvería a ver a mí familia, quiénes se habían preocupado por mí salud todos mis veinte largos años y quiénes me habían ayudado en mis momentos más difíciles. Pero tengo que superarlo, limpié mí cara y miré al frente. Un montón de cadáveres tirados en la calle, locales cerrados y edificios derrumbados. Vehículos destrozados, cuerpos desmembrados por los más hambrientos que quedaron botados en la calle.

Era un paisaje muy deprimente, realmente espero que mí familia no sufra la maldita enfermedad.

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Luego de meses de arduo entrenamiento y largas clases de aviación me encontraba listo para emprender mí primera misión.

El bombardero al que me subiría era un B-2A de mucha clase. Los controles eran tal y como me habían enseñado, aunque viéndolos ahora se veían más grandes. Me seguirían también mis dos colegas, ambos en aviones Phantom para controlar a los cazas y anti-aereos terrestres.

Mí bombardero tenía un avanzado sistema de camuflaje, por lo que es imposible que los cazas puedan fijar sus misiles a mí avión. Sin embargo, la ametralladora de estos y las defensas terrestres si pueden darme. Pero para eso estaban mis amigos, para defenderme en lo que completaba mí misión.

Me advirtieron que en caso de que el sistema de camuflaje falle y me fijen, debía usar la ametralladora manual para destruir los misiles. No era tarea difícil, porque la realidad virtual se había encargado de mostrarme el escenario más realista para practicar.

- Estás listo novato? - mencionó Phantom con cierta superioridad, antes de subir a su avión.

- Ja! Me hubieras visto practicando todos los días. Soy un as de las alturas! - dije.

- Pues mira que ahora será de verdad eh? No vaya a ser que te agarre pánico - jugó Phantom en lo que subió a su avión y revisaba los sistemas.

[Beta] Epidemia: un planeta en crisisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora