Dioses del cosmos

Capítulo 14 (De Nuevo Huyendo)

¿Nunca se han sentido muy cobardes y extrañamente temerosos?, la impotencia es una sensación muy común pero quien la siente también se siente extrañamente no apto para este mundo, aprender a salir adelante y saber que hay cosas que no están a nuestro alcance es algo que debemos de saber todos.

Esa mañana desperté a Carlos ya que el siempre se despierta súper tarde, no importa si duerme todo un día, el se despierta cuando quiere, así que aproveche y lo levante tirándolo de la cama con una pequeña risa, el se levanto y puedo asegurar que me grito una grosería en el pequeño mundo se sus ideas, bueno nos arreglamos y agarramos nuestra ropa, al terminar esto llego Alexandra y dijo que ya era hora para partir, pero que no seríamos los únicos ya que el planeta quiere rescatar a gente importare como grandes mentes de la física etc. El día era muy denso y el ambiente se sentía pesado, con frío ya que los demás tenían abrigos,el Sol estaba oculto por nubes y una nube en la superficie donde estamos... como la llamaban, o si, neblina, eso así parecer una sensación de terror y pánico, pero nada más que un como dije ambiente muy pesado.

Al subir a la nave que por cierto se veía que estaba modificada con partes de la nuestra que dejamos en Marte (Que a decir a ciencia cierta, sigo sin saber que eran esas criaturas del planeta Marte, pero espero que pronto se resuelva es), nos sentamos casi a la mitad de la nave y algo me llamo la atención había gente normal, de la tierra y nos miraban con extrañeza con un toque de curiosidad, yo dije:

-"Hola"

Mientras todos se sorprendían al notar que hablaba su mismo dialecto, pero era obvio, somos una evolución de los terrícolas y por lo tanto controlo su dialecto, pensé (jajaja y mi padre decía que aprender español terrícola sería en vano y alguna perdida de tiempo), Carlos por su parte sonrió y soltó una pequeña risa al percatar mi pensamiento, y recordé que el podía leer mi pensamiento si no me esmeraba por cerrar y no dispersar mis ondas cerebrales.

Al estar en la nave me percate de que había un lugar vació y alado de este una joven de unos 18 años que parecía un tanto preocupada pero la relajaba algo, tenia una especia de círculos en sus oídos conectados a una tabla azul que emitía nombres, ella me miro y parecía curiosa, así que me acerque y le pregunte qué era lo que hacia, pensé que se espantaría pero ella sólo contesto:

-"Escucho música con audífonos, daaa"

No entendí esa expresión pero por el tono parecía que me estaba diciendo estúpido o algo por el estilo, yo resignado y algo pensativo por el comentario de la joven me regrese a mi lugar y comencé a charlar con Carlos, como no quería que nadie escuchara abrí mi campo telepático y comenzamos a hablar de como los seres humanos eran tan extraños y un tanto primitivos, el se comenzó a reír al escuchar esto, esta risa fue interrumpida por un chico que llego y ocupo el lugar alado de la joven quien al verlo le dio algo que no entendí... sus labios tocaron mis labios, "¿Qué era eso?" me pregunte, al principio pensé que tenían hambre o algo por el estilo pero pronto deje de pensar en eso, "Cosa de humanos" pensé con una risa, de un momento a otro llego Alexandra y se puso en el lugar del copiloto.

Pronto Carlos y yo notamos que en todos los asientos había gente de al parecer la misma edad pero eran igual que la joven y el joven, todos eran parejas...

Pronto la nave despego sucediendo...