Cap XIV

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Narra Silver.

Camine ligeramente por el pasillo mientras Sonic y Amy continuaban en el despacho de Shadow, buscando alguna prueba. Miraba con sumo cuidado cada rincón inspeccionandolos por algo que captara la atención. Debo reconocerlo, este lugar es gigantesto, perderse seria muy facil.

Camine un poco hasta notar una puerta doble de madera al final del corredor, pero lo que mas captó mi atención fue lo apartada que se encontraba, y no solo eso, también lo solitaria que estaba.

-Que...extraño-mis pies se dirigieron directamente en aquella dirección, para luego intentar abrirla, sin embargo. Estaba bajo llave-Demonios.

Hubiera dejado de intentar abrirla y regresarme pero, ¿solo a mí lograba parecerle extraño?. Volví a observar el cerrojo tomando un poco de distancia propinandole una patada, la primera no funciono pero al siguiente intento logre abrirla. Miré dentro contemplando el gran numero de estantes y cajones que abarcaban la mayoria del espacio.

-¿Y esto que es?-murmure.

-¡Oye tu!-escuché a mis espaldas. Gire de inmediato encontrandome con uno de los guardias mirandome fijamente-¿Que estas haciendo?.

Intercambiamos miradas. Muy bien ya sabes que hacer.

-Yo solo, nada importante-articulé con una sonrisa- veras yo...-

Se acerco hacia mí, pero logré golpearlo detras de la nuca, dejandolo inconciente. Mire nuevamente por el corredor asegurandome de que nadie viniera y nos encontrara, para luego arrastrarlo dentro del lugar.

-Muy bien, ¿que busco exactamente?-musité rebuscando entre los cajones rapidamente observando todo tipo de papeles y objetos inspeccionandolos con la mirada. Buscaba todo tipo de material sospechoso algo que me diera algún indicio de lo que ocurría.-no, no, inservible.

Cada nuevo cajón que abría era algo diferente, y podía darme cuenta que en este lugar se tenia regristro de todo lo que ocurría en el reino, fuera importante o no. Aunque por ahora no estaba llegando a nada.

-¡Demonios!-mascullé frustrado. Estaba muy claro que solo perdía mi tiempo estando aquí.-tengo que volver.

Me levanté del suelo dispuesto a salir de ahí, no sin antes propinarle un golpe al gran estante a un lado. Al hacerlo este se tambaleó, me aparte rapidamente observando como caída de manera pesada sobre los otros a su alrededor ocasionando un efecto domino. Tras disiparse el polvo, parté mi brazo notando el caos que había provocado. Bueno, ya quedamos  a mano.

-¿Uh?-emití observando una marca detrás de la pared. Pude acercarme rapidamente esquivando cada lo mejor que pude cada cosa en el suelo. Llegué al fondo del lugar pasando mi mano por la pared. Era evidente que eso estaba ahí por un proposito.-necesito...una-mire por todos lados en el desastre, en busca de algo filoso, hasta percatarme que era portador de una espada en mi cintura- Excelente.

Tome la espada pasandola por el contorno de lo que creía era un compartimiento secreto. Retiré el papel tapiz que lo cubría, confirmando mi corazonada. Una compuerta pequeña de acero yacía ante mis ojos y para mi mala suerte, bajo llave.

-A ver...-murmuré empuñando la espada. Intenté con todas mis fuerzas abrirla al notar que mi esfuerzo era inutil, decidí encontrar la llave. Había muchos objetos aquí, la llave no debe de estar lejos-La llave, llave, llave.

Busqué desesperadamente entre todo el desastre, sabía que mi pequeña busqueda debío haberlos alertado de algún modo, encareciendome aún mas de tiempo. Comencé a perder las esperanzas hasta que, pude dar con algo.

-¡La llave..!-levanté aquello, encontrandome con no solo una llave, sino con cinco mas. Era un llavero-¡ Oh, vamos!.

Comencé a probar una por una, siendo rechazado una y otra vez. Mis manos comenzaron a temblar, cada intento fallido solo hacia incrementar aún mas mis nervios, me encontrarian.

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