Hoy por fin después de haber esperado tantas horas, llego el día, hoy después de tanto tiempo conoceré a Agnes.
Me siento tan feliz, las cosas están yendo de maravilla.
Bueno, debo aceptar que también estoy super nervioso.
Por alguna razón no puedo sacarme una melodía de la cabeza, aquella cuyo nombre es "Je te leisserai des mots". Es tan única, pura, y sincera como ella.
Tal vez es porque las canciones le dan color a la vida. Como Agnes le da color a la mía.
Bueno ya, exagero con mis ideas.
Después de haber pensado tanto, me levante y le di los buenos días a Agnes junto con una selfie.
Pensé que le parecería lindo verme con mi rostro de recién despertado.
—Hahaha ¿Te acabas de despertar?—Dijo ella.
—Si haha.
—Estoy muy emocionada por hoy—Dijo Agnes con muchos corazones.
—Oww, yo también lo estoy Agnes.
—¿Entonces a las 4?
—Si, a las 4.
Pasaron unas horas, cuando Agnes mando una foto suya con un lindo vestido amarillo y lindos zapatos cafés.
Mis ojos se iluminaron al verla. No había visto a alguien mas bella que esta muchachita.
—¡Woow Agnes! De verdad te ves muy hermosa.
—Gracias Louis, tu también te veras muy guapo—Dijo ella.
Estaba completamente nervioso, tal vez ella se decepcione de mi al ver que soy mas feo que en mis propias fotos. Tal vez ella espera a un chico mas maduro, o super educado, o inmaduro.
Como sea, lo haré por nosotros. Lo haré con tal de que ella sea feliz, y que disfrute el día de hoy como ningún otro.
Mientras me envolvía en mis pensamientos, me puse una camiseta de vestir azul, un pantalón negro medio flojo, y unos Vans. El típico outfit de chico básico.
Me puse un perfume elegante, de esos que hueles y sonríes de lo bien que huele, con tal de que Agnes disfrutara un poco mas al abrazarme, si es que lo hace claro.
Ya era hora de pasar por Agnes.
Ella vivía casi al otro lado de la ciudad, pero no importa.
Por ella estaría dispuesto a manejar hasta no poder mas con tal de ver su bello rostro.
Durante todo el camino, las gotas de la lluvia caían en el parabrisas, el cielo lucia un color rosado. Podías oler el rico aroma a tierra mojada en cualquier lado que estuvieras. Y si ponías atención por un segundo, podías escuchar las llantas del carro rozar con las piedras mojadas de la carretera.
Al llegar a casa de Agnes paso algo horrible, de verdad no podía creerlo.
Las llantas de mi auto se poncharon, las 2 de la parte trasera.
Quería llorar pero Agnes salio de su casa.
De verdad me quede sin palabras. Su cabello pelirrojo ondulado, el vestido amarillo, y ese rico perfume con aroma dulce.
—¿Que tienes Louis?—Pregunto ella.
—Las llantas de mi carro se poncharon, creo que tristemente no podremos ir al cine el día de hoy.
Agnes me abrazo. Me paralice por un rato, y sonreí. Sentía tan bonito el tener sus pequeños brazos rodeando mi cuerpo.
—No te preocupes guapo, por favor miremos una película aquí. Hice galletas—Dijo ella mientras sonreía con sus lindos cachetitos rojos.
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Nuestra Historia
Teen FictionEsta es la historia de Louis (un chico sad), el cual siempre ha sido rechazado por las mujeres, hasta que encuentra a Agnes, al parecer su primer amor.