Yo no era de los que se ilusionaba por cosas tan simples como el dichoso efecto sorpresa. Odiaba todo lo inesperado. Salí de mi habitación maldiciendo a los mil rayos cuando me golpeé el dedo chiquito del pie contra la puerta. El calor comenzaba a asentarse en Seúl, tomé mi ropa deportiva e hice un poco de ejercicios. Gabriele estaría todo el día trabajando, ya le había dicho que tendría otra cita. Quizás por el cansancio o porque de verdad se percataba de que yo lucía como tigre en celo, pero su respuesta fue bastante positiva.
Ni siquiera me repiqueteó, ni me leyó la cartilla. Y eso de alguna manera me asustaba.
Era mi semana de vacaciones, pero aún así no pude despegarme del trabajo. Luego de regresar a casa y tomar una ducha tórrida, decidí a regañadientes que era momento de revisar la montaña de emails. Los zapateé uno tras de otro. Jane, mi directora, nunca se molestaba en escuchar mis ideas de artículos interesantes para escribir en su revista. Obviamente no querría verse expuesta ni tampoco se atrevía a dejar que su único empleado "negro" hablara del racismo o de temas estigmáticos como el avance del movimiento LGBTQ en el país asiático.
Seguí divagando hasta que hubo una oferta que no me llenó los ojos, pero haría feliz a mi hermanita querida. Tomé mi móvil sin pensarlo dos veces.
—¿Qué tal? Estoy bien, adiós—berrinchó sin dejarme hablar, pude imaginarla rodando sus ojazos—¿Es ahora que te acuerdas que tienes una hermana? ¿Qué quieres? —Reí bebiendo mi proteína.
—Pensé que te agradaría la noticia de que le haré una entrevista a Ahn Sung Min, pero con semejante recibimiento...Supongo que no, chao...
—¡No te atrevas a colgar Keene Davidson! ¡Oh, My Heavenly Blessed Lord! Necesito que le preguntes de todo. Desde qué marca de cepillo dental usa hasta...
—Valeska. Ustedes las fans viven por cada cosa. —Espeté mirando las fotos de Ahn Sung Min en el buscador en línea—Con suerte la pregunta la podría incluir en la sección de "10 cosas imprescindibles". Hermanita, trataré de pedirle una fotito para ti y quizás alguna pista de su próximo concierto.
Tenía las entradas del próximo concierto de X Revolution ya compradas e incluso usé esa tarjeta de crédito que mi padre me dio y me rehusaba a tocar a no ser que fuera importante, solo para poder pagar el área VIP así Valeska y Gabriele podrían disfrutar de una mejor vista y quizás más interacción. Además que incluía el "Meet and Greet" después del concierto. Ellas se lo merecían por ser dos de las mujeres más importantes en mi vida.
—Mi cumpleaños se acerca ¿Te imaginas que dieran un concierto en esa semana?
—Y yo que pensaba que te vendría bien un cambio de aires en tu cumpleaños. No creo que te molestes porque te traiga a Korea por tu cumpleaños ¿Cierto?
Su grito ensordeció mis oídos de una forma placentera. Valeska es todo para mí y me atrevería a decir que viceversa. Más que un hermano, me siento papá sin haber tenido hijos.
—¿En serio...yo... en Korea? No lo puedo creer, mañana especularé en el instituto.
—En vez de especular tanto, deberías mejor tus notas de matemáticas. —Regañé. —No quiero excusas, si no mejoras entonces puedes irte olvidando de tu cumpleaños.
—Tus palabras son ley, todo por Ahn Sung Min.
—¿Pensé que dirías por mí? Bueno siéntate a esperar a que Ahn Sung Min te pague el ticket de avión. Adiós. No le comentes a mamá, espera a que sea yo quien le cuente.
—Eres insoportable, love you hermanito.
—Love you back kiddo.
Chiquilla inmadura que me no deja de hacerme sonreír. Necesitaba de ella, de mi madre. La distancia enseña a valorar a esas personas que asumiste siempre estarían junto a ti. A darle el lugar que merece cada quien en el corazón. Una lágrima osada rodó por mi mejilla cuando la nostalgia abrazó mi mente.
ESTÁS LEYENDO
Delusions
Short StoryOlía a rosas y supo a decepción. No, él no creía en los hilos del destino, ni las almas gemelas, ni en lo sobrenatural. No tenía tiempo para esas tonterías, como él solía llamarlas. Pero a todos les llega ese día donde las barreras se derrumban y el...