"Joven escucha con atención todo aquello que dicen en el Instituto. ꋊunca dudes de su verdad porque las verdades pueden ser reales o ficitiosas dependiendo si creemos o no"
- Historia ℅100 de mi propiedad
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— profesor ¿conoce la razón por la cual Aoi-chan no vino hoy a clases? — se acercó la pequeña yashiro preocupada al notar el radical cambio en el lugar.
— ¿Aoi-chan? Aquí no estudia ninguna estudiante con ese nombre.
Muchos estudiantes comenzaron a murmurar acerca de la actitud extraña que la chica comenzaba a tomar, Yashiro en completa confusión decidió dejar el aula dejando a su profesor que grito en más de una ocasión su nombre. Los ojos zafiro de una joven miro con completa seriedad el punto donde la chica de cabellos lila se sentaba.
— ¿higurashi-san?
— Disculpe profesor debo de faltar a su clase en esta ocasión, no me siento capacitada esta vez — levantándose de su asiento.
Higurashi Kagome una chica de 12 años, si, como están leyendo nuestra pequeña sacerdotisa regreso a su pre adolescencia. Después de los acontecimientos ocurridos en la época antigua por desgracia ella había perdido su vida, la Perla decidió darle una nueva oportunidad cambiando radicalmente su destino y ahora solamente era una niña pequeña que se limitaba a observar todos los cambios que se establecían en su Instituto junto a Hanato-kun el séptimo misterio.
— Existe la simple posibilidad de que esa chica cruzara la frontera — mirando enfrente a su camino una cabellera rubia — Minamoto-san
— Higurashi-san — mirando a la fémina de tamaño pequeño enfrente suyo — Tomara cartas en el asunto esta ocasión ¿no?
Un mechón de color blanco se des ubicó de su lugar de origen que era dos coletas bajas amarradas con cintas. La niña miro por unos instante su cabello para asentir ante las palabras del rubio mayor que al recibir la respuesta de la azabache paso al lado de ella para murmurar:
— " Espero que cumplas con lo que esta diciendo Miko-sama"
La expresión de ella no cambio en ningún momento, incluso que supiera toda la verdad de ella nunca le reflejaría miedo o nervios. Minomoto Teru, solamente era un exorcista principiante si lo comparaba con sus habilidades, era considerado como un idol al igu al que ella misma, la diferencia era que a ella no le interesaba mucho que fuera colocada en un pedestal tal alto.
— salón de arte — observando las escaleras que se encontraban en una condición excelente aún — Eres tan complicada "Misaki"
Dando pasos consecutivos en aquellas escaleras en ningún momento al llegar al cuarto escalón fue enviada al mundo espiritual, la adolescente se había dado cuenta que cada vez más los rumores que se esparcian lograban obtener suficiente fuerza para cambiar el ambiente por completo.
— Hmp . . . Así que tendré que esperar hasta la hora adecuada — el rostro de la joven formaba muecas de molestia ante esa situación — Realmente si quisiera entraría a ese mundo, me impide no actuar en el momento justo que la sirvienta del Séptimo logre correr riesgo o tal vez me preocupa por encima de ellos dos, la seguridad de Kou.
