100 años de soledad

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19 de diciembre de 2019 - Show de Susana Giménez

Caminé nerviosa por el camerino. A decir verdad, nunca o casi nunca me ponía nerviosa ante las entrevistas, pero esta vez era distinta. ¿Por qué? Estaba a punto de averiguarlo .

La entrevista arregló como cualquier otra, igual que siempre Susana, mi amiga, podría llamarla así, me hizo las preguntas rutinarias en cuanto a cómo quirúrgico Pimpinela, cual fue la canción que nos ayudó, preguntas que tanto yo como mi hermano habíamos contestado un millar de veces.

Después de casi 40 años en el escenario, tantas entrevistas alrededor del mundo, era normal. Pero a pesar de todo, a lo largo de los años se sumaban los fanáticos cada vez más jóvenes y era nuestra obligación contarles cómo fue que llegamos a donde necesariamente.

Hablamos sobre mi nueva obra teatral Dolly, sobre la gira, sobre el próximo concierto en Viña del Mar, sobre el porqué Joaquín no había tenido que venir hoy, había tenido que quedar al terminar de organizar la gira de cara a 2020, sobre el lanzamiento de Rocío como cantante, entre otras muchas cosas.

- A mí personalmente ... - Empezó Susana - La canción que sin duda me tocó la fibrita sensible es la de " 100 años de soledad ". Es brutal la canción. ¿Me cantas un trocito? - Pidió la presentadora - Uno chiquitito.

- Siempre te las arreglas para que cante ... - Sonreí, esa canción era una de las que más me costaba en los espectáculos, pero no tenía escapatoria, el público clamaba - Otra vez él volvió a equivocarme, juro que me voy a levantar, no vuelvo a estar con alguien por estar, aunque tenga que vivir cien años de soledad ...

Cada vez que la cantaba recuerda los fracasos de mi vida amorosa, todos aquellos que pueden ser ser, pero nunca fueron... recuerdo que la cantaba mucho en los espectáculos pero tras la primera separación con Pablo la eliminada totalmente del reportaje de los espectáculos, a pesar de La insistencia de Joaquín.

- ¡Es divina, es divina! Me encanta - Repetía Susana una y otra vez. - ¿Y el corazoncito, chichi? - Soltó la rubia, a pesar de que odiaba ese diminutivo y ella lo sabía mejor que nadie. - ¿Sigues con mi querido Pablito Alarcón?

- No me llames así. - Dije entre risas, algo incómoda. - Sí, Pablo y yo seguimos juntos, estamos muy bien. De hecho, cuando acabe aquí, nos vamos a cenar.

- Son absolutamente geniales, ¿no es así chicos? Yo soy muy fan de ellos dos juntos, de hecho, tanto que ... Lu seguro que me mata, pero no importa. Yo lo haré de todos los modos. Me disculpas amiga.

Siempre había odiado las encerronas y en sus entrevistas había alguna vez siempre.

- Yo voy a pasar, que me han comunicado desde la dirección que Pablo ha llegado al plató. - Me comunicó Susana.

Las cámaras enfocaron a Pablo que se acababa de sentar en una silla detrás de las afueras del plató, ajeno a todo lo que estaba a punto de pasar. Se consideró como uno de los asistentes del programa le hablaba y le declaró que le reclamaban dentro del conjunto de grabación. Pobre Pablo, pensé para mis adentros. Él odia estas cosas, no debí pedirle que viniera a recogerme.

- Con ustedes, el galán de los galanes, el sueño húmedo de más de una mujer, el increíble Pablo Alarcón. - Anunció la rubia, levantándose a recibir a Pablo.

Susana siempre tenía que dar la nota. ¿El sueño húmedo de más de una mujer ...? Se estaba pasando un poco de la raya, seguía siendo mi pareja. Cuando Pablo entró en el estudio, aún no se había colocado el micrófono, le tendió su chaqueta negra a uno de los chicos de la producción y abrazó a Susana, le dio un poco de molesto, a pesar de la sonrisa que traía. Yo le conocía, eran muchos años de relación. Él era la otra mitad de mi ser.

Mi vida, una canciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora