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"11"

[해찬]

—Andale Jen, acompañame— Le pedí de nuevo a Jeno para que me acompañara pero este se negó

—No puedo, a parte tu mamá te va a regañar si sé da cuenta que fuiste acompañado. Mejor hablamos al rato, tengo que ir a terminar el proyecto—

—Bueno Jen— Golpeoó mi brazo y se fue en dirección a su casa. Por lo tanto yo seguí caminando por la plaza cerca de casa.

—¿Y a dónde vas? Le preguntó el lobo a caperucita— Moon Taeil se encontraba en un kiosko con una cámara y con ella me tomó una foto, yo reí ante aquello

—A casa de mi abuela, le respondió caperucita al lobo feroz. Y sí, realmente voy a casa de mi abuela— Subí los escalones del kiosko y caminé por el mientras veía a Taeil

—Vine a tomar unas fotografías... Hey te queda muy buen el rojo— Pasó su vista por mi abrigo y yo sonreí— ¿Vives por acá cerca?—

—Sí, muy cerca... Oye, perdón por lo de la mañana, quedé como un estúpido frente a ti ¿Por qué no me dijiste que tú eras el pintor antes de decir tanta tontería?— Rió al recordar

—Porque me gustó lo que dijiste, es la opinión más honesta que alguien me ha dado y sentía que si te decía quien era, te ibas a guardar aquello y dirías alguna mentira para no hacerme sentir mal— Asentí, parecía que me conocía —Y es más, quisiera que pudieras ver más de mis obras—

—No, ya tuve una mala experiencia esta mañana— Negué

—En serio, créeme, tu opinión es importante. Es tan sincera y parece que no te guardas nada, ningún suspiro—

—No puedo, tengo que ir a entregarle esto a mi abuela— Le enseñé la bolsa con medicamento y negó

—No serán más de quince minutos, vivo cerca. Es importante tu opinión necesito algo más fresco que me ayude a mejorar mis obras—

—Bueno, pero solo quince minutos, no más— Ya íbamos a dar marcha a su casa cuando suena mi celular

—¿Qué pasó mamá?—

-Tu abuela habló y dijo que todavía no tenía los medicamentos-

—Ya voy llegando, la farmacia estaba cerrada y tuve que ir a otra—

-Bueno, apurate-

—Ash, sí, eres insoportable, adiós—

—Perdon, pero me están esperando— Taeil de su saco sacó una tarjeta

—Ten, acá está mi dirección para cuándo tengas tiempo, por favor ve, no olvides que te necesito— Me miró con esos ojos, parecía que quería traspasar mi alma

—Bueno, adiós— Hice una reverencia y él tomó mi mano después rascando en la palma, se me hizo un gesto raro

—Te espero en la noche— Asentí y me fui de ahí.

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