Cap. 26

840 34 5
                                    

La vida está llena de altas y bajas, llena de buenas y malas cosas, y eso lo he aprendido con el tiempo, desde el problema con mi madre hasta mi "relación" com Julián, estoy realmente jodida, después de aquella vez que nos entregamos sin temor, las cosas han cambiado para bien, a tan solo días de la boda.

Ha llegado el momento que ambos hemos temido, hablaremos acerca del contrato, no se si el aún piense lo mismo de aquella noche, y eso me pone los nervios de punta. Hemos decidido hablar sobre eso en la cena, como es costumbre el solo se la pasa trabajando. En estos días le he dicho que debe tomarse unos días de descanso, el que trabaje de esa manera me preocupa tanto, me preocupa su salud. El solo me responde que tomara esas vacaciones en nuestra luna de miel.

Estoy encerrada en la biblioteca, este se ha convertido en mi lugar favorito, lo encuentro cómodo para pensar sobre muchas cosas y reflexionar sobre otras. Julián me ha dicho que hoy saldría de la oficina a las 6, ha decidido salir temprano para que tengamos más tiempo para hablar.

Según estudios el enamorarse de alguien tan solo toma 4 minutos, pensaba que era solo una tontería, ¿Quién podría enamorarse de alguien en ese tiempo?, me parecía bastante absurdo, hasta que el destino puso a Julián en mi camino y fue como un ¿Decias?.
Solo tomo una mirada saber cuanto me habia enamorado de él, sin saber en que momento termine entregándole eso que tenía miedo de dárselo a alguien más, le di mi corazón, mi confianza y mi lealtad, estaba metiéndose en lo más profundo de mi, y debo admitir que tenía miedo, miedo de lo que pasara en esa cena hoy.
Quizás estoy entregándole todo demasiado rápido, pero no puedo frenar este sentimiento y esto que estoy sintiendo, es como si quisiera darle hasta mi último suspiro.

Aún sentía sus caricias por mi cuerpo, su aliento por mi cuello y sus besos húmedos recorriendo todo mi cuerpo, pensaba que era una tontería cuando decían que con una mirada podían ponerle "los pies de gelatina", y es que ahora veo que estuve equivocada, cada vez que me mira siento como si no fuera capaz de seguir de pie, siento un calor crecer por mi estómago yb un escalofrío recorrer toda mi espalda hasta la nuca, y debo admitir que es una sensación bastante agradable.

La hora ha llegado, he decidido solo usar un vestido negro pegado con una pequeña abertura en el lado derecho, unas zapatillas negras y también decidí llevar el pelo liso, opté por no llevar nada de maquillaje, quiera ir lo más natural posible.

Julián me había mandado un mensaje diciendo que me esperaba en el restaurante
"Roger's" a las 6:30.
Estaba lista a las 5:50, el había mandado a alguien por mi, dijo que llegaría a buscarme el chófer a las 6, por lo que tenía 10 minutos para controlar los nervios que cada vez crecían más y más en mi.

Cuando llegó la hora, tomé un abrigo y salí hacia el carro, donde el chófer me esperaba para abrirme la puerta.

-Buenas noches Señorita Ruth.
Saluda amablemente mientras abre la puerta trasera del carro

-Buenas noches.
Contesto amablemente ingresando al auto.

En cuanto el auto se pone en marcha, mis nervios comienzan a hacerse presentes, una pequeña adrenalina recorre mi cuerpo, mi corazón late demasiado rápido y mis pies no dejan de moverse.

Joder Ruth, es solo una cita nada de el otro mundo.
Me repito una y otra vez en mi cabeza y es cuando me doy cuenta que también es nuestra primera cita, nunca habíamos salido así como ahora, y eso no ayuda en nada pues mis nervios solo hacen que sean más y más grandes.

-¿Falta poco para llegar?.
Pregunto al chófer mientras miro una y otra vez hacia su lugar y hacia la ventana.

-Estamos a 5 minutos señorita.
Me mira a través del espejo retrovisor y me regala una pequeña sonrisa, pero hay algo en esa sonrisa que me inquieta.

Y es en ese momento donde  siento que algo no anda bien, algo en mi dice que algo está mal.

Busco mi teléfono en mi ropa y recuerdo que no tengo bolsas, lo busco en el abrigo y doy con el, tengo 8 llamadas perdidas de Julián y miles de mensajes, y uno de ellos hace que mi cuerpo se quede inmóvil.

"¡Ruth ¿Donde te has metido?, el chófer llego 10 min. tarde por una emergencia"

"Ruth contesta!!!"

"Contesta!!!"

"Solo dime que tomaste un taxi, por favor!!"

Estoy apunto de llamar a Julián cuando siento que el carro frena de golpe, haciendo que mi cara de con el asiento de el conductor y que el teléfono salga volando.
Rápidamente me repongo y trato de alcanzar el telefono pero una mano lo toma rápidamente por mi, y es cuando veo que el "chofer" lo avienta por la ventana, intento abrir la puerta para salir corriendo, para huir, pero el es más rápido y pone el seguro, empiezo a golpear las ventanas intentando romperlas para saltar por ahí.
Pero de nuevo el es más rápido y brinca hacia donde estoy yo tomándome de la cintura y haciéndome sentar, para depsues sentarse a ahorcadajas en  mi aprisionando mis piernas.
Inútilmente trato de golpearlo en la cara pero el con una sola mano toma mis dos brazos sosteniendo los encima de mi por las muñecas, dejándome inmóvil.
Mientras que con su mano libre me toma con fuerza de la barbilla.

-¿Pensaste que te iba a dejar ser feliz?.
Escupe en mi cara mientras que siento que las lágrimas comienzan a mojar mi mejilla.

-¿De qué hablas?, yo no te conozco.
Respondo mientras hago muecas de dolor.

-¿No me recuerdas  mi pequeño duende?.
Una sonrisa escalofriante comienza a formarse en su cara.

Y al escuchar ese pequeño apodo hace que sienta como si un balde de agua fría cayera por todo mi cuerpo, haciendo que esos recuerdos que había enterrado en lo más fondo de mi ser salgan de nuevo a la luz, todas esas noches de pesadillas, todo eso que me costó sembrar salgan de nuevo.

-Veo que ya lo recordaste mi pequeño duende.
Suelta con brusquedad mi barbilla para después tomar un mechón de mi pelo.

-¿Co..cómo me encontraste?.
Me golpeó mentalmente ante mi tartamudeo.

-Digamos que el salir con alguien reconocido y amado por las personas de las revistas ha sido de buena ayuda.
Su mirada viaja desde donde están sus piernas aprisionandome hasta donde sus manos me toman por encima.

Joder, debi haber pensado antes de aceptar ser fotografiada com Julián.

-Te dije que me dejaras en paz, ¿qué no quedo claro la última vez?.
Le gritó en la cara.

-O mi pequeño duende, en mi memoria solo están esas noches tan felices que tu y yo teníamos.
Cada palabra que sale de su boca solo me provoca repulsión y asco.

-No me vuelvas a llamar así!!.

-¿Por que?, ¿no te hace recordar esas cosas hermosas que vivimos?.
Se acerca a mi cara y intenta besarme, pero yo giro la cara a tiempo.

El solo sonríe, y siento mi cuerpo temblar, pero temblar de miedo, estoy sintiendo todas esas sensaciones que me costaron tanto superar.

Mi peor pesadilla ha regresado, el monstruo de aquel tiempo está de nuevo aquí, y hace tiempo pude escapar a tiempo.... pero ahora no se que pase.

En estos momentos en mi cabeza solo esta Julián y nada más.

-Quita tu sucia boca de mi.
Le gritó al sentir como comenzaba a dejar pequeños besos por mi mejilla hacia mi oreja.

-Te he estado deseando tanto, he estado soñando cada día contigo, y me he tocado pensando en ti, si supieras cuentas veces soñé con saber cómo sería estar dentro de ti.
Susurra en mi oído.

-Solo me provocas asco, no hay otra cosa que solo eso, eres un maldito cerdo de mierda, te mereces ir al infi...
Siento su mano contra mi mejilla, este pedazo de mierda me ha abofeteado.

-Callate perra.
Grita para después soltarme y regresar al asiento de conductor.

La vibración del auto comienza a sentirse dando marcha a este, y es cuando dejo escapar más lágrimas, mi mano viaja hacia mi mejilla sobandola por el golpe que me dio.

LA PROPUESTA (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora