Siempre -hs-

9

Suena el despertador. Son las 7 de la mañana. 
En una hora entro al trabajo.

Me dirijo al baño, me baño y al salir me pongo un vestido negro.  Hasta las rodillas.

Me haga un rodete,  me pongo labial y me voy directo al auto con mi bolso. 

Hoy tenemos un acto por que pudimos trasplantar un corazón, nunca antes existió algo así  y por voto, me toca dirigirlo a mi.

Al llegar al hospital hay muchos reporteros. Se ven desde la ventana de mi sector. Ya tengo la bata lista.

Al cabo de unos diez minutos estoy al frente de 200 personas, médicos,  enfermeros y toda clase de sector. También reporteros. 

-Buenos dias a todos. Es un placer para mi ser la que represente esta institución,  como ya saben estamos aquí para responder preguntas y explicarles los procedimientos que esta institución y los profesionales que la conforman llevamos a cabo un trasplante de corazón,  nunca antes visto. - digo calmada. - a continuación les voy a mostrar imágenes vía proyector.  - digo.

Apagan las luces y voy pasando imágenes.  Del corazón,  de la cirugía y del antes y después. 

Se encienden las luces, como verán,  les contare lo que ocurrió. 

-desde más de 10 años la Institución Slosse esta en investigación para poder realizar una intervención de este calibre. Nuestros especialistas no se rindieron jamás.  -veo como alguien abre la puerta de la sala de conferencias y ingresa Jake. Al verme me sonríe.  Se sienta en primera fila- como les decía, estábamos tratando de ver la solución para que las estadísticas de muerte por infartos baje, entonces dijimos ¿y si cambiamos el corazón? pero no por alguien que ya este muerto, no funcionaria.  Tiene que ser una persona que haya sufrido una muerte cerebral, así el corazón todavía latiendo, servirá para otra persona.
Como ya sabemos cuando una persona tiene muerte cerebral no hay mucho que podamos hacer. - digo. - entonces nos avisaron que un hombre de alrededor de 50 años estaba mal del corazón,  al mismo tiempo recibimos una llamada de un joven de 19 años que al no usar casco en su moto, choco y golpeó la cabeza.  Realizamos exámenes y dieron muerte cerebral. Hablamos con su familia para pedir la autorización y ellos la dieron. Practicamos la cirugía con mucho cuidado,así que la intervención fue exitosa.  - sonrió.  Todos aplauden.

-ahora para que despejan sus dudas, lo voy a invitar al que hizo todo esto posible.  El cirujano Sawn gull. - aplauden y entra el.

Me da un abrazo y bajo,  sentándome al lado de Jake. -que haces aquí? - le susurro. 
-mi viaje se pospuso- dice

No respondo. Me limitó a escucha a Sawn.  El hombre que cualquier mujer quisiéra.

Es alto, Rubio, ojos azules y sonrisa radiante.  Un partido perfecto.

Al terminar con las preguntas pasamos al catering,  estoy con Jake y Julia. Se acerca Sawn.

-oh Margot, tan bella como siempre.  Me dejaste anonadado con tu discurso de hoy - dice sawn y me sonríe. 

- Gracias- digo sonrojada.

Julia tose. Harry nos mira impaciente. 

Sawn los saluda, de pronto se acerca la mujer que abrazo a Harry en el comedor.
Esta le dice algo en el oído y este diciendo -compermiso - se retira.

-como las mujeres tienen influencia en los hombres- dice Julia riendo.
Sawn la observa. Yo me rio.

Sawn- que te parece si salimos a cenar Margot? - me pregunta.

Cuando estoy a punto de responder una enfermera de mi sector se acerca, preocupada - doctora Maciel, su paciente, el joven deat esta sacándose las vías.  - dice.

Sin dudar salgo al ascensor, al piso 6to. 

Corro hacia la habitación y veo que esta Jake, claro. Es su paciente también.  Los policías lo tratan de agarrar pero al ejercer la fuerza lo lastiman.
-sueltenlo - digo
Los policías obedecen. 

-que es lo que te sucede deat? - le pregunto.  Tiene sangre por todos lados -quiero curarte- digo. Acercándome despacio.

-Mira deat, tranquilo. Relájate.  Estamos para ayudarte. - dice Jake.

-me quieren enviar a un loquero no? - dice deat.

-No. No iras. Pero déjanos ayudarte- digo.

Me acerco y le tocó la cara, el solo me observa asustado.
-me dejas curarte? - le susurro.
El asiente, se vuelve a acostar. Le sonrió y voy en busca de lo que necesito.

Al volver esta dormido. -le aplique un sedante leve, así puedes trabajar tranquila.  Cualquier cosa me llamas. - dice yéndose. 

Hago mi trabajo,  le vuelvo a poner las vías,  los electrodos y le limpio toda la sangre. Es un niño asustado. No tiene la culpa de nada.

Al terminar mi jornada laboral vuelvo a casa. Ahora si, cansada.