Volver a Amar

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Un mes antes...

"Buenos días mi pequeña bella dama, ¿como has dormido?, espero tengas un día excelente y que todo vaya increíblemente en la oficina, ya voy rumbo al gym, espero no te hayas quedado dormida como de costumbre. Te amo mucho"

Fueron las palabras que parpadeaban en mi móvil aquella mañana, las cuales me hicieron despertar y me provocaron una enorme sonrisa en el rostro.

En seguida deslicé el dedo en la pantalla y proseguí a contestar.

"Buenos días mi amor, yo también deseo que todo vaya súper bien el día de hoy, no puedo creer que mañana cumplamos 9 meses juntos, ha pasado el tiempo tan rápido que aún creo que estoy soñando. Gracias por ser mi despertador personal. Te amo"

Puse el celular sobre la mesita de noche de a un lado de la cama, me levante y me senté al borde de esta.

-Por fin mañana nos vemos una vez más, ha pasado el tiempo, no tiene ni la más mínima idea de cuantas ganas tengo de verlo- sonriendo y aplaudiendo bobaliconamente como una niña de 5 años, le dije a mi hermana, Adriana. - Puedes creerlo, mañana después de un mes nos vemos de nuevo.
- Si bueno, a mi no me importa que venga, viene a verte a ti, no a nosotros- argumento mi hermana.

Adriana es la tercera de los 4 hermanos, 15 años mayor que yo. Es viuda y sin hijos. Su esposo falleció a causa del alcohol y las drogas, eso es lo que argumentaban los médicos, sin embargo la familia no cree que ese sea el único motivo, ya que el cadáver tenía una lesión tan fuerte en la cabeza que tenía incluso el lado izquierdo hundido. Debido a esta noticia, Adriana sufrió un aborto involuntario, dejándola de esta manera estéril para el resto de su vida.

-Bueno, bueno - digo volteando los ojos. - no seas tan amargada hermanita, no puedes alegrarte nunca por mi?, ¿no puedes ver lo feliz que soy?, a veces quisiera que no fueras tan amargada y pudieras dejar que comparta mi felicidad contigo.

-Ya mejor callate y déjame seguir durmiendo, y mejor apurate antes de que mi mamá venga a regañarte, que al final la paga con todos, menos contigo.

-Si, lo que digas- dije mientras me pongo las sandalias, tomo una toalla de baño y me dirijo a tomar una ducha.

Coloco el móvil sobre la tapa del W.C, mientras empieza a sonar Perfecta de Miranda. Abro la llave del agua caliente y un poco la del agua fría, nivelandolas para que el agua tibia comience a caer por mis hombros y espalda, mientras yo canto todo pulmón esa canción que tanto me gusta.

- Niña, apurate. Se está haciendo tarde y estas gastando mucha agua- grita mi madre, doña Sofi.

-Ya voy mamá, no tienes que gritar, es que esta tan buena el agua que relaja.

-Si, claro. Pero, ¿no te das cuenta de toda el agua que estás  desperdiciando?

- Si, ya voy, ya voy.

Sin mas, termino mi ducha relajante, tomo la toalla que llevo conmigo y la ocupo para cubrirme el torso. La música se pausa, y salta a la pantalla un mensaje que dice...

Yo también estoy ansioso de verte, mi princesa. Te amo.

Salgo del baño y mi madre me mira, como voy sonriendo tontamente y me dice.
-Estas muy contenta ¿no?, me da mucho gusto verte así. Siempre feliz, sonriendo, cantando y sobretodo bailando. - Mami - le contesto - ¿Cómo no voy a estar feliz si mañana llega mi amorcito?, hace un mes a que no nos vemos y mañana ya cumplimos  nueve meses, ¿puede creerlo?.

- ¿De verdad? ¿Nueve meses tan pronto?

-Si, quien lo diría. Por eso es que estoy tan feliz, pero bueno mami, me gustaría estar platicando más, pero se hace tarde.

-Lo sé, así que apurate. Es más no te maquilles. Te ves bastante bien así, con o sin maquillaje, siempre serás tú.

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Salgo de casa y me dirijo a la parada del bus, por suerte este no ha salido y aún tiene lugares disponibles.
Lo abordo y escojo el lugar junto a la ventanilla. Me acomodo y recuerdo que no he contestado el mensaje que había llegado cuando estaba terminando de ducharme. Saco el móvil, desbloqueo la pantalla y lo contesto enseguida.

"Mi amor, lo siento, me he tardado mucho en contestar. Pero es que se me hacia tarde, tuve que ducharme lo mas rápido posible, que no pude contestarte. Te amo. Ya estoy deseando a que sea mañana"

Una vez enviado el mensaje, me coloco los audífonos, abro las playlist que tengo en el reproductor del movil y no sé que elegir. Después de ver cada una de ellas al fin decido escuchar un poco de Big Metra y su clásico Desnudate, vaya que amo esa canción, cierro los ojos y dejo que la música inunde mis oídos.
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Me encuentro en la oficina, ordenando archivos y redactando nuevas fichas técnicas de los productos que se producen en la empresa. Han pasado al rededor de cuatro horas desde que envié el último mensaje a Felipe. No ez
S normal que él no me haya contestado aún, nunca pasa tanto tiempo antes de que lo haga.

Tomó el móvil y abro la app de mensajes (si el del globito verde), veo que mi mensaje ha sido entregado pero no leído. Entro en la conversación y veo que la última conexion la marca hace un par de minutos. Me preocupa un poco, ya que el nunca deja de contestarme, aun estado enojados.

Abro de un toque el área para escribir mensaje y me dispongo a redactar.

"Amor, ¿Todo bien?. Estoy un poco preocupada, ¿Ha pasado algo?, espero que no. De ser así en cuanto tengas tiempo espero puedas contármelo. Te amo"

Le doy a enviar, y sucede lo esperado, salen ambas palomitas. La primera de enviado y la segunda de entregado.
Agauardo un momento y cuando salta el En linea, espero un momento más, pero no, no ha leído mi mensaje otra vez. Se ha desconectado nuevamente.

La ansiedad comienza ha consumirme, estoy pensando en llamarle al móvil o no. No quiero que piense que estoy loca. Mejor espero a que pueda contestar, tal vez tiene mucho trabajo. Trato de no hacerme más ideas, dejo mi móvil y sigo con mis pendientes.

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9:00 pm

Aún no hay contestación, me pregunto si  le ha pasado algo a Felipe, estoy al borde de la psicosis. No espero más. Ya ha pasado todo el día y lo he pensado mucho. Cojo el celular y lo llamo. Me sudan las manos, me tiemblan las piernas, como si no conociera a la persona que estoy llamando. Y ¡Oh sorpresa!, salta el buzón de voz.

Han pasado 20 minutos, me decido a volver a llamarlo. Una vez más salta el buzón — ¿Qué está pasando?- digo en mi mente. - ¿Por qué no me contesta? ¿Y si le ha ocurrido algo?

Me recuesto en mi cama, giro de un lado a otro, como pollo rostizado. Es media noche y no se nada de él. Me pesan los ojos, la preocupación y el cansancio me estan torturando. No sé qué hacer, no sé a quién más llamar. Poco a poco el sueño me está venciendo, hasta que no puedo más y me quedo dormida.

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2:35 am; timbra mi celular.

"Amor, perdón por la hora y no haberte contestado, ocurrió una situación bastante complicada y espero puedas perdonarme, pero no podré ir a verte mañana, prometo que en cuanto quede resuelto estaré ahí contigo. Y no te preocupes yo me encuentro bien solo es una situación difícil de explicar, ya te lo contaré todo. Te amo"

Abro los ojos con dificultad. Apenas y puedo leer, me lastima el brillo de la pantalla. Leo el mensaje y me tranquilizo un poco. Le contesto enseguida.

"No te preocupes amor, me tranquiliza saber que estás bien. Hablamos mañana. Te quiero"

Bloqueo el celular. Y me quedo profundamente dormida.