Día 23

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Morir de amor
es como morir y resucitar para seguir mueriendo
es una especie de mueca de la muerte
un chiste del amor para hacerse sentir a pasos agigantados

Morir de amor no es como morirse propiamente dicho
sino como irse pudriendo
desmantelar el alma
y olvidar las instrucciones para armarla nuevamente

Morirse debe ser mejor que morirse de amor
aunque más frío
porque lo bueno de morirse de amor
es ese calientito sentido cada vez que la recuerdas
y la haces tuya por un momento

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