Mi nombre es Víctor Torres tenia 45 años de edad y digo tenía por que acabo de morir.
Morí por un disparo en mi corazón de unos ladrones, solo para después conocer a un dios que me reencarno en el mundo de One Piece.
En una isla con un aspecto deplorable lleno de piratas, casa recompensa y traficantes de armas se encontraban junto todos en el mismo lugar donde la muerte es el pan de cada día.
En esa isla en un pequeño callejón estaba Gabriel con su nuevo aspecto. El era un joven apuesto de complexión delgada, cabello rojo sangre y ojos rojos. Y su vestimenta consistía en un abrigo negro sobre una camisa y pantalones negros ajustado.
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Al levantar la mirada a kilómetros sentía el olor de la sangre para que mi cuerpo comenzaba a calentarse, pero al momento me tranquilice.
Cerré los ojos para crear un lingote de oro y al abrir los ojos un pequeño lingote que cabía en mis manos había aparecido.
"jejeje seré muy rico y poderos". Pensé solo para caminar.
Al salir del callejón muchas personas me quedaron viendo y la maldita razón es que mido entre 3,10–3,15 cm. Eran un gigante ante todas las personas que me veían.
Lo primero que hice fue entrar a un local o lugar que tenía aspecto de casino, apenas acércame unas mujeres hermosas se acercaron a mí.
"Qué lindo señor no quiere pasar un rato con nosotras". Dijo una mujer entre sus 17 años de edad con una vestimenta muy reveladora.
"Qué tal si me acompañas primero a jugar un rato y después nos divertimos eso va para todas". Dije con una sonrisa amable para que todas las chicas se parada a mis lados.
Fueron como 6 mujeres jóvenes que mi miraban con felicidad en su rostro.
Sin más entramos al casino y cambie 5 lingotes de oro del porte de una caja de naipe. Las personas que atendían era un hombre obeso.
Con respeto el hombre le llevo hacia la sala vip. Que era la parte subterránea del establecimiento.
Estuve jugando unas horas donde con mis engaños y experiencia en las vegas había logrado conseguir unos millones de fichas.
Las mujeres me alaban me lavan besos en el cachete. Me ponían las maños en medio de sus tetas.
Hasta que todas las luces de la sala se apagaron... momentos después las luces alumbraron un pequeño altar.
"DAMAS Y CABALLEROS EN ESTE MOMENTO SE LLEVARA LA SUBASTA DE ESCLAVOS". Exclamo en el micrófono para ver como muchas personas se aglomeraron en el lugar.
Las chicas notaron mi curiosidad y hablaron. "Señor que está interesado". Pregunto una mujer de cabello oscuro con apariencia joven y senos de copa c.
"Si, parece interesante me podrían decir el costo normal de los esclavos". Pregunte para tomar una copa de licor de una mujer peli naranjado.
"bueno señor la lista de los precios normales son..." ella pauso para alzar la mano hacia un camarero. "Me podría dar una lista sobre los precios inicial". Le pregunto y el hombre saco una hoja y se la dio.
