Elena está en la puerta de casa esperando a que Scott la recoja, llega tarde... cuando dijo que llegaría en 5 minutos debió multiplicarlo por 6...
Scott al fin llega.
Elena: Cuando dijiste que en 5 minutos estarías aquí acaso lo que querías decir en realidad es que llegarías en 45...
Scott: ¡Lo siento mucho de veras!
Elena: Hugo se ha puesto a hacer deberes para que pudiésemos quedar antes... ¿has hecho que una persona haga algo así para luego tú llegar tarde?
Scott: Lo siento, pero como íbamos a quedar más tarde me he retrasado eso es todo... la próxima vez te avisaré con tiempo, lo prometo.
Elena pone cara de incredulidad.
Elena: No prometas cosas que sabes que no podrás cumplir Scott... Mira, lo he pensado mejor, vete a casa y ya mañana cuando se me pase el cabreo hablamos.
Scott: ¿En serio? He tardado 10 minutos en llegar aquí... Vamos, aunque sea daremos un paseo...
Elena: Ese es el plan que traías, ¿verdad? Me vendrías a recoger tarde, me pedirías perdón y daríamos un paseo... Todo te saldría bien y te llevarías a la chica, ¿es eso no?
Scott: ¿No lo haces solo porque he llegado tarde o me equivoco? Esto viene de más atrás...
Elena: Esto viene a que nunca llegas a tiempo cuando quedamos, a que me hablas cuando sabes que nos vamos a ver, si no es así podemos estar sin hablar unos 3 días... No quiero que dejes de vivir por mí, pero sí quiero un simple mensaje.
Scott: ¿Llegar tarde 3 o 4 veces y que no esté todo el día hablándote son tus motivos para cabrearte? Increíble...
Elena: ¿Te estás escuchando? ¿3 o 4 veces? Si lo que acabas de soltar por tu boca es lo que crees es que vives en una realidad paralela...
La charla se va acalorando poco a poco, cada vez hablan más y más alto hasta que llegan al punto de gritarse el uno al otro... Lo que hace que Hugo se asome por la ventana de su habitación para ver qué está ocurriendo.[Llamada telefónica]
Hugo: Hola.
Elena: Hola Hugo, ¿qué ocurre?
Se escucha de fondo a Scott preguntando prácticamente a voces que qué hacía Hugo llamando a Elena.
Hugo: Esto... ¿Va todo bien? Se os escuchaba tener una conversación algo tensa... Solo quería saber si necesitabas algo.
Elena: ¿Nos estás oyendo desde casa? Lo siento si te hemos molestado y no te hemos dejado hacer tus deberes...
Hugo: ¿Bromeas? No te preocupes por eso, pero de verdad... ¿Quieres que haga algo o está todo bien?
Elena: De acuerdo, está todo bien no te preocupes, ya estamos acabando... Así que ahora después hablamos, ¿vale?
Hugo: Hasta ahora.
[Fin de la llamada telefónica]Scott: ¿Qué quería ese niñato ahora? ¿Sabes qué? Me está empezando a molestar que siempre esté metiéndose donde no le llaman...
Elena: Oh, ¿te refieres a cuando estabas tan borracho en aquella fiesta en la piscina que me quitaste la parte de arriba del bikini delante de todo nuestro curso? Claro... culpa mía, le diré que la próxima vez que vuelvas a ser un capullo te deje en paz (Elena pone una cara que deja ver su sarcasmo).
Scott: Mira tenías razón, mejor me voy antes de que digamos algo de lo que nos arrepintamos.
Elena: Va a ser lo mejor.
Scott se va, en ese momento Hugo sale de casa, va a tirar la basura y ve a Elena sentada en las escaleras de su casa, está llorando así que Hugo decide acercarse a hablar con ella.
Hugo: ¿Estás bien? (Pensamientos: menuda tontería de pregunta, no ha entrado en casa y está llorando, no está triste sino desolada) ¿Necesitas algo?
Elena: Nada me sale bien... Scott se comporta como un capullo, tu hermana me deja tirada, mi madre no ha vuelto aún a casa y he olvidado las llaves...
Hugo: ¿Es por eso que no entraste en casa? Podrías haber venido a nuestra casa...
Elena: Bueno... también quería pensar supongo.
Hugo: Si quieres entrar vamos a cenar enseguida...
Elena: ¿Puedes quedarte conmigo? No quiero estar sola...
Hugo: ¿Y tiene que ser aquí? ¿No preferirías venir a casa y estar en mi habitación? No quiero que te pongas mala...
Elena: Iremos a tu habitación entonces.
Hugo y Elena se dirigen a su casa, suben las escaleras y llegan a la habitación de Hugo, entran y empiezan a hablar.
Hugo: ¿Quieres algo de beber o de comer?
Elena: No te preocupes, estoy bien... Por cierto, gracias por la compañía, de verdad que te lo agradezco.
Hugo se acerca a Elena y le da un beso en la mejilla, lo que dibuja en la cara de Elena una sonrisa sincera.
Elena: Gracias... siempre sabes qué hacer...
Hugo (mira fijamente a los ojos a Elena): Tengo algo que decirte... creo que desde que tengo uso de razón he sentido algo por ti, algo muy peculiar...
Elena: ¿A qué te refieres?
Hugo: Cuando te veo sonreír siento como me inunda una sensación de felicidad, cuando me defiendes si mi hermana se mete conmigo, cuando me das esos abrazos que de verdad me ayudan y es como si parase el tiempo... Creo que te quiero.
Elena: ...
En ese momento Hugo va acercándose poco a poco a Elena, ambos se miran a los ojos y a sus labios... En ese instante alguien llama a la puerta, ambos se separan y no pueden parar de pensar en lo que ha estado a punto de ocurrir.
Hugo: Adelante.
Abren la puerta y ven a Silvia.
Silvia: ¡A cenar enano! ¿Elena? ¿Qué haces tú aquí?
Elena: Se podría decir que no llevo un buen día... Mi amiga olvida que habíamos quedado o simplemente lo borra de su memoria, Scott se porta como un capullo y mi madre no aparece... tu hermano es lo único bueno que me ha pasado hoy Silvia... En serio, no estoy de humor para esas preguntas.
En ese momento Elena se levanta, le da un beso en la mejilla a Hugo que hace que se le erice la piel... Y sale de la habitación sin cruzar palabra con Silvia y se va de la casa.
Silvia: ¿Qué demonios acaba de ocurrir?
Hugo (pensamientos): Oh, ya lo creo... estoy enamorado de esta chica a más no poder.
Hugo: Que por fin alguien ha hecho lo que tenía que hacer hermanita... ha aparecido eso que la gente llama karma, uno recibe lo que da.A la 1 de la madrugada la habitación de Elena se ilumina, esta mira por la ventana esperando ver a Hugo, al cual encuentra mirando por la ventana también, ambos sonríen... Entonces Elena coge el móvil y escribe un mensaje, es para Hugo.
[Mensaje de texto]
Elena: Gracias por ser lo único bueno de este día... ¡Buenas noches!
Hugo: Gracias a ti por defenderme una vez más... me encanta ver a esa Elena... ¡Mañana hablamos!
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Simplemente... No sé cómo
JugendliteraturLa vida de un adolescente nunca es fácil y teniendo en cuenta la situación actual de nuestra protagonista no iba a ser mejor. Aquí empieza el camino que tendrá que recorrer nuestra protagonista, Elena, una chica de 17 años que no lo ha pasado precis...