El principio del final

•1•

Un golpe seco me saca instantaneamente de mi sueño.

Me toma unos minutos darme cuenta de que ya no estoy en mi cama sino en el que creo que es,el suelo de mi habitación.

¿Que?

El aturdimiento no me permite moverme,aun adormilada no soy capaz de percibir lo que pasa a mi alrededor.

Dolor,un dolor en mi cabeza es lo primero que soy capaz de sentir,estoy segura que no es grave pero aun asi mi mano se dirige a la zona del golpe.
No hay sangre,eso es bueno.

Gritos,es lo segundo a lo que le tomo conciencia.

Mi mirada se dirige hacia arriba y antes de que pueda detenerla,una bofetada me da de lleno en la cara.

Esteban..

Lo pienso pero no lo digo,se que es el.

Cuando por fin puedo reaccionar,las lagrimas se agolpan en mis ojos pero no las dejo salir,no me lo permito.

Una mano se aferra a mi muñeca y con violencia tira de ella hasta que me encuentro de pie debilmente.
No levanto la cabeza,no esta vez.

-Mirame Liss,te he dicho que no me gusta cuando agachas la cabeza.

La voz de mi padrastro inunda mis oidos,y su sola presencia me remueve el estomago.

Te odio.

Me callo si no quiero que empeore,si no quiero que la situación sea peor.

Sin otra alternativa lo miro,y me arrepiento al segundo de hacerlo.
Su mirada cargada de odio se clava en mi fijamente,y por un segundo quiero regresar mi vista al piso pero no lo hago,se la sostengo.
No se que espero encontrar en su mirada.
¿Lastima? ¿Arrepentimiento?
Pero sea lo que sea,no encuentro nada a mi favor.

El color de sus ojos se oscurece varios tonos y se,de antemano,que eso significa una sola cosa.

-No nos vamos a ver por mucho tiempo,¿lo sabes no?-el tono seductor pero pervertido que utiliza no pasa desapercibido para mi.

-Porfavor,déjame ir-no quiero sonar suplicante pero lo hago,mi voz sale tan baja que dudo que me haya oído.

Su mano agarra mi menton y por instinto le corro la cara.

-¿Dejarte ir Liss? Creéme que te vas a ir,y muy lejos,pero antes de eso tienes que despedirte de tu padre,¿no creés?

-Tu no eres mi padre,no eres nadie para mi,oh si espera,eres nuestro asno mantenido.-las palabras salen de mi boca antes de que pueda pensarlas,y me doy cuenta que fue un grave error.

Por segunda vez en menos de 1 hora,otra bofetada es impactada en mi rostro y esta vez,dejo que las lagrimas hagan su camino por mis mejillas.

¿Merezco todo lo malo que me pasa?

No es la primera vez que ese pensamiento invade mi mente,pero antes de que pueda analizarlo,la mano de esteban encuentra su camino a mi garganta para asi estamparme contra una de las paredes de mi habitación.
Mi respiración empieza a fallarme y se que me esta faltando el aire.
Quiero decirle a Esteban que me suelte,quiero rogarselo pero en lugar de mi voz,lo unico que sale de mi boca son sonidos jadeantes e inentendibles.

Con las pocas fuerzas que me quedan,consigo darle una patada en la entrepierna.
Su agarre se suaviza,no del todo pero suficiente para empujarlo y correr a la puerta.

Ingenua.

Antes de que pueda escapar,su mano se enrieda en mi cabello para tirar de el con fuerza y hacerme caer de un golpe seco al suelo.