Ayer fue un día cansado y me da que hoy será igual. Me encuentro en mi habitación revisando unos documentos de mi hermano.
-Hermana -me habla mi hermano recostado de la puerta observando lo que hago.
-Sí -lo observo como si tuviera algo en el rostro.
-Tu novio está en la sala -dice sin emoción alguna.
¿Qué?, ¿qué hace Dylam aquí?
-No, ahora estoy aquí -dice mi novio molestando a mi hermano.
Mi hermano lo mira con enojo.
-¿Puedes dejarnos solos, hermanito? -le pregunto mientras dejo los papeles en mi mesa de noche.
-Está bien -dice y se va.
-¿Ahora me dejas los mensajes en vistos? -me pregunta Dylam aguantando el enfado muy visible.
-No sé a qué te refieres -le digo tranquila.
-¡No te hagas, por favor! -grita molesto.
-No me hago -contesto muy tranquila.
-Vengo porque quiero que salgamos juntos está noche -me pide esta vez con voz calma.
-No put...
-Ya hablé con tu hermano -dice rápidamente para impedirme hablar.
-Lo sé -le afirmo, pues lo conozco.
-¿Entonces? -se molesta de nuevo.
-No iré, Dylam -le repito.
-¿¡Pero por qué!? -grita de nuevo.
-Debo estar con mi jefe -contesto viendo los documentos de mi hermano.
-¿Y tu novio qué? -pregunta muy molesto ya y alzando nuevamente la voz.
-Dylam debo cumplir con mi trabajo -le contesto sin importarme sus berrinches.
-¿Y yo qué? -pregunta de nuevo-. Dime -insiste al ver que callo.
-También, pero...
-Pero ¿¡Qué carajo!? -ruge.
-Es que no lo entenderías -le recuerdo.
-Por Dios, siempre es lo mismo contigo -da vueltas en mi cuarto.
-¿Así es? -le pregunto con voz calma.
-Yo intento que nuestra relación no se derrumbe y tú ni lo notas.
-Yo igual intento lo mismo, pero tú no me entiendes.
-No te hagas la víctima, maldita sea.
-Solo te digo la verdad -le contesto a su maldición.
-Sí ajá, ¿sabes qué? mejor me voy antes que explote y haga algo de lo que después me tenga que arrepentir.
-¿Eso fue una advertencia?
-Tómalo como mejor te convenga Daniela -se encoje de hombros.
-Y eso una afirmación.
Veo cómo sale enojado de mi habitación mientras me quedo yo, sola ella.
Creo que, tal vez tengamos que darnos un tiempo para descansar.
-Y, ¿qué pasó? -pregunta mi hermano con curiosidad.
-¿A qué viene eso? -pregunto con la misma curiosidad.
-¿Cómo que a qué viene eso? -pregunta extrañado por mi otra pregunta como respuesta.
-No me respondas con otra pregunta quieres -le regaño.
ESTÁS LEYENDO
¿Seré Suya? 1° Parte
RomanceNunca nadie en su vida le había dicho ''eres mía'' o ''serás mía'' y es más nunca nadie le había alzado a mirar con deseo, pero ahora que tenía novio y esté le dice ''eres mía'' no siente lo que pensó que llegaría a sentir; eso bonito de ser reconoc...